Fuente de Foncalada

Historia de la Foncalada de Oviedo

Aunque de primeras puedas pensar que se trata de una simple fuente, 'La Foncalada' de Oviedo es historia viva de la ciudad. Data del siglo IX, por lo que es una de las joyas del prerrománico en Asturias. Fue construida por orden de Alfonso III el Magno, por lo que nos encontramos en la última etapa del prerrománico asturiano, aunque, como en todo, hay muchas discrepancias al respecto. Pero lejos de meternos en debates, lo que sí podemos contaros es que los estudios arrojan que se trata de un espacio en el que antes había un edificio que hacía las funciones de balneario. Y como todo en esta época, seguro que tenía una gran carga y simbolismo religioso.

'La Foncalada' de Oviedo se encuentra en la calle a la que da nombre, y ubicados frente a ella, se puede ver un exterior muy interesante que nos da pistas sobre sus orígenes e historia. En la parte superior de la misma hay unas inscripciones, y dentro de estas la Cruz de la Victoria, muy característica del reinado de Alfonso III. Una cruz muy característica de Asturias, de Oviedo y de todos los ovetenses. Además, la fuente también cuenta con otras inscripciones muy deterioradas por el paso del tiempo, por lo que resulta imposible poder descifrarlas. 

En la actualidad, 'La Foncalada' de Oviedo es el único monumento prerrománico civil que se conserva y que tuvo fines de utilidad pública. De hecho, ningún otro lugar, monumento o espacio tuvo una utilidad tan prolongada en el tiempo como esta fuente, ya que hizo servicio a los habitantes de la ciudad durante ¡11 siglos! Aún se utilizaba como lavadero a comienzos del pasado siglo XX. A finales de esta misma centuria, entre 1991 y 1994, se realizaron diversas excavaciones arqueológicas en el entorno de 'La Foncalada', lo que permitió descubrir el canal primitivo de la ciudad. 

Arquitectura de la Foncalada de Oviedo

La fuente de 'La Foncalada' está construida en piedra de sillería y es de planta rectangular. Tiene una cubierta a dos aguas, y en ella diferenciamos claramente tres partes. Una de ellas deja a la vista un canal que suministraba el agua desde el manantial. Por otro lado, tenemos el hueco central o templete, que hace las funciones de puerta. Justo en el centro se puede ver un arco de medio punto. Y por último, el tercer elemento sería el estanque, con esa función inicial de balneario que muchos creen. 

Con toda probabilidad, 'La Foncalada' es la gran desconocida de todos los tesoros que conforman el Prerrománico de Oviedo. Pese a ello, no hemos de olvidar que ha sido testigo mudo de más de un milenio de historia  de la ciudad, y por tanto, bien merece una visita. ¿Nos cuentas qué te ha parecido? ¡Esperamos que disfrutes en tu visita a Oviedo!