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Guia de viaje de

Bilbao

Iglesia de San Antón

Una de las Iglesias más conocidas de Bilbao, es la Iglesia de San Antonio de Abad, popularmente conocida como San Antón, ubicada a orillas de la Ría Nervión, muy cerca del Mercado de la Ribera.

La Iglesia parroquial de San Antón es la más popular de Bilbao, pero no la más antigua.

En el lugar que una vez ocupó la Plaza Vieja de Bilbao, puerta de acceso por excelencia desde la ría al mítico barrio de Casco Viejo, se encuentra la iglesia de San Antón. Símbolo de la ciudad, aparece retratada en el mismo escudo de la villa, junto con el puente que lleva el mismo nombre.

En el año 1984 recibió el mérito de Bien de Interés Cultural con la categoría de Monumento Histórico-Artístico Nacional, un año después de que durante las inundaciones de Bilbao sufriera la destrucción de parte de su patrimonio. Sin duda, es uno de los lugares imprescindibles si te preguntas qué ver en Bilbao.

Historia de la Iglesia de San Antón

Las iglesias siempre han sido el centro de la vida de sus ciudades. Esto fue lo que ocurrió en el caso de esta Iglesia de San Antón, que vivió el devenir de la ciudad a través de los siglos. En Buendía os queremos recomendar esta visita y para ello vamos a contaros parte de su historia y algunas de sus curiosidades. Es una iglesia que ha visto parte de la historia de Bilbao y las anécdotas que acumula son muchas y de muy diversa índole. Una iglesia muy querida por los bilbaínos que aún hoy la miran con la reverencia con que la miraron en tiempos pasados.

Antes incluso de que Diego López de Haro fundara la villa de Bilbao en 1300, donde ahora se ubica la iglesia existía un vado donde atracaban los barcos y el puente de San Antón, servía como paso de las mercancías que llegaban de Castilla. Era un punto estratégico en la economía de Bilbao.

Cuando Bilbao obtuvo la Carta Puebla por la que fue reconocida como villa, el Rey Alfonso XI de Castilla, mandó construir el Alcázar y una muralla que servía tanto de defensa como para proteger de inundaciones. Si bien el Alcázar fue sustituido por una primitiva iglesia pasada la primera mitad del siglo XIV, hubo que esperar hasta 1468 para que esta fuese ampliada, con el objeto de satisfacer las inquietudes espirituales de una población en continuo ascenso.

Desde su construcción, el templo ha sido objeto de numerosas reparaciones, ampliaciones, reconstrucciones y cambios de funcionalidad. Fue en 1544 cuando se terminó de rematar su portada renacentista. En el campanario construido en 1775, en estilo barroco por Juan de Iturburu, todavía hoy se puede observar en la cúspide de su torre un giraldillo original. Por su parte, la portada es un bellísimo ejercicio arquitectónico en clave renacentista.

Qué ver en la Iglesia de San Antón

Os queremos hacer un pequeño resumen de aquellas partes del templo en las que vale la pena detenerse más durante vuestra visita.

Las tres capillas de la Iglesia de San Antón

  • La capilla del Santísimo, que preside un retablo rococó, del último tercio del siglo XVIII. En él resalta la imagen de la Inmaculada y una talla de Santa Águeda en el ático.
  • La antigua capilla de Nuestra Señora de la Piedad que aunque se fundó en 1554, la reja, una de las mejores muestras de la rejería renacentista de Bizkaia, se remonta a casi 20 años antes, al 1538.
  • La última capilla acoge las imágenes de Santa Lucía, San Roque y San Sebastián, probablemente obras del escultor cortesano Juan Pascual de Mena.

 Buena parte de nuestra visita a la Iglesia de San Antón la ocuparán sus curiosidades y sus misterios. Y este es uno de sus encantos, la búsqueda de todos ellos. En la capilla de Santa Lucía, se encuentra una puerta lateral que debería comunicar con La Ribera, pero en el exterior a primera vista no existe ninguna puerta. Sin embargo, si ponéis atención se pueden intuir en la pared exterior trazos de su existencia en otros tiempos. Actualmente, la puerta, aunque se mantiene en el mismo lugar, está cegada, si la abrimos se pueden ver el inicio de unas escaleras que mueren al poco de iniciarse.

A dónde llevaba la puerta, a día de hoy todavía es una incógnita, algunas teorías apuntan a que en los tiempos en los que la capilla pertenecía a la familia Leguizamón, unos pasadizos subterráneos conectaban la capilla directamente con su Casa-Torre de Somera. Otras, por el contrario, apuntan a que en el siglo XVII cuando esta capilla paso a ser propiedad del Consulado, en aquellos tiempos pared con pared de la iglesia de San Antón, la puerta servía de acceso privado como medio para evitar el contacto con la plebe.

Desde el exterior de la iglesia y encima del atrio podemos observar una pequeña terraza, conocida como el balcón de San Antón.  Esta terraza no es propia de la construcción de la iglesia, sino que se remonta a la época en la que el antiguo Ayuntamiento y el Consulado de la Villa estaban en el edificio anexo a la iglesia de San Antón. Servía como palco para los espectáculos que se celebraban en la hoy desaparecida Plaza Vieja de Bilbao: corridas taurinas, procesiones de Semana Santa o ejecuciones públicas por medio del empozamiento, entre otras.

El osario de la Iglesia de San Antón

Durante las excavaciones arqueológicas que se realizaron en la Iglesia de San Antón durante los 90, aparecieron numerosos restos humanos bajo el suelo del templo, restos acumulados durante siglos.  Algunos de los restos se siguen guardando en el interior de la iglesia, y se conservan en el habitáculo que queda bajo la escalera de acceso al coro, ante las miradas esculpidas de San Cosme y San Damián, patrones de los médicos.

Otro vestigio del cementerio lo hallamos en el curioso diseño que exhibe el suelo, estampado con innumerables figuras geométricas negras. Se trata de losas planas procedentes del cementerio que la iglesia acogió desde sus orígenes hasta el siglo XIX, y que, en 1726, durante una importante reorganización, fueron reutilizadas como enlosado.

El órgano de San Antón

La iglesia de San Antón cuenta con el que tal vez sea el órgano romántico francés más grande de la Villa, construido por Charles Mutin. Por sus teclados han pasado músicos ilustres como Arturo Intxausti, compositor junto a D. Claudio Gallastegi del popular himno a la Virgen de Begoña, «Begoñako Andra Mari».

En la actualidad, puede escucharse los sábados por la tarde y los domingos por la mañana en las eucaristías, y, por supuesto, en los conciertos que ocasionalmente se ofrecen en él, lo que no deja de ser una actividad que hacer en Bilbao, sobre todo si os gusta esta temática.

Ubicación de la Iglesia de San Antón

Detalles

    Horario

    Catedral:

    • 10:00 a 18:30h - Lunes a sábado

    Iglesia San Antón:

    • 10:00 a 13:00h / 15:00 a 17:00h - Lunes a sábado

    Domingos cerrado

    Precio

    • General: 4 €
    • Mayores de 65, Grupos (+15), Entre 13 y 18 años, Universitarios (hasta 25), Desempleados y familias numerosas: 3,50 €

    Incluye audioguía

Cómo llegar a la Iglesia de San Antón