Accesibilidad
Desafortunadamente la arquitectura actual del Templo de Debod no cuenta con accesos adaptados a minusválidos y la circulación en su interior es limitada
Madrid es una ciudad con infinidad de cosas para ver y para hacer. Por eso hay que planificar visitas por Madrid que nos permitan no dejarnos nada (o dejarnos lo menos posible) en el tintero. Para echaros una mano, os traemos uno de los lugares que todos deberíamos ver, al menos una vez: el Templo de Debod., una de las imágenes más típicas de la ciudad, sobre todo al atardecer.
Realmente es un lugar mágico que os asombrará. Un imprescindible para todos, desde mayores hasta pequeños, y sobre todo, para los enamorados de la cultura egipcia
El Templo de Debod es un monumento funerario egipcio con más de 2.200 años de antigüedad y fue un regalo de Egipto a España en 1968. Los egipcios quisieron compensar la ayuda tras el llamamiento internacional de la Unesco para salvar los templos de Nubia. A España le regalaron Debod; a Estados Unidos, Dendur; Taffa, que se encuentra en el Museo de antigüedades de Leiden, en los Países Bajos; y Ellesiya a Italia.
La historia cuenta que hacia el templo peregrinaban para venerar a Isis, la diosa de la maternidad y el nacimiento, y es que, parece ser que el mismo lugar donde se ubicaba el templo, Isis dio a luz a su hijo Horus.
Se cubrió la terraza para proteger el templo de las inclemencias del tiempo y se recreó una atmósfera similar al clima nubio mediante la instalación de aire acondicionado caliente en el interior del templo.
Cuando se ubicó en Madrid se buscó que tuviera la misma orientación que en su lugar de origen, de este a oeste, el lago que se encuentra alrededor del templo es un recuerdo al río Nilo, el mayor río africano.
Cuenta la leyenda que al caer la noche os podéis sentir observados por la figura de un gato. Los que lo han presenciado cuentan que se trata de Adijalamani de Meroe reencarnado.
Los curiosos que queráis acceder al templo podréis hacerlo de manera gratuita. Cuenta con dos plantas y en la superior hay expuesta una maqueta que da a conocer la historia del Templo de Debod y todos los templos que había en Nubia.
También podréis encontrar información sobre Egipto, su mitología y su cultura, acompañada de explicaciones sobre los jeroglíficos en el interior del templo. Pero para comprenderlo todo, como el significado de la ubicación del edificio, se exponen vídeos y producciones audiovisuales sobre sus paredes.
Al estar rodeado de jardines el mejor plan es acercaros dando un paseo desde las plazas de España o de Oriente para sentaros sobre el césped a contemplar el atardecer. La manera que el sol tiñe el templo de colores dorados hasta el anochecer es una imagen que se quedará grabada en vuestras retinas.
Es una zona perfecta para el descanso, sobre todo en verano a la sombra de sus árboles, y también los es para la fotografía.
Además del propio templo, está el mirador del Templo de Debod donde se tiene una espectacular panorámica de una buena parte de Madrid. Desde el Palacio Real, la catedral de la Almudena, la Real Basílica de San Francisco el Grande o el río Manzanares, también se observa la zona sur de la capital para terminar por atisbarse a mano derecha el barrio de Argüelles con la torre de iluminación y comunicaciones del Ayuntamiento de Madrid como referencia. Una amplia y privilegiada vista que será del agrado de quienes tengáis el gusto de acercaros al templo
Calle de Ferraz, en la montaña del Príncipe Pío
Dirección: Calle de Ferraz, 1, 28008 Madrid
Todo el año
Del 15 de junio al 15 de septiembre
* Cerrado: 1 y 6 enero, 1 mayo, 24, 25 y 31 diciembre:
Para llegar al Templo Debod utilizando el transporte público de Madrid, las mejores opciones de la ciudad son: