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Plaza Jacinto Benavente
El Barrio de las Letras de Madrid es un espacio cultural en el que convivir con los mejores escritores del Siglo de Oro español. Y dentro del mismo, hay espacios que merece la pena ver y disfrutar. En el límite oeste del mismo se encuentra la Plaza de Jacinto Benavente, o Plaza Benavente a secas, como prefieras. Un rincón lleno de vida a escasos cinco minutos de la Puerta del Sol. ¿Quieres conocerlo? ¡Ven con nosotros y entérate de todo!
Sitios como la Plaza Jacinto Benavente de Madrid son los que nos acaban enamorando para siempre de la ciudad. En sitios así quieres perderte, pasar horas y horas y descubrir los lugares que guardan. Son muchos, así que nos vemos en la obligación de presentarlos en orden, para que lo sepas todo nada más poner un pie allí. Una buena manera es hacerlo con los free tours en Madrid que tienes a tu disposición. Irás allí en primera persona para conocer por ti mismo todo lo que tenemos que contarte en este artículo.
Historia de la Plaza de Jacinto Benavente de Madrid
Pese a su importancia y a lo querida que es por todos los madrileños y madrileñas, la plaza Jacinto Benavente es relativamente joven. Data de 1926, momento en el que se derriban los edificios en torno a la plazuela de la Aduana Vieja y la plazuela de la Leña. En la actualidad, por cierto, estos espacios forman la calle de la Bolsa en Madrid. Por cierto, uno de los edificios primitivos de esta plaza fue el Convento de los Trinitarios Calzados, construido en la época de Felipe II y derribado tras la desamortización de Mendizábal en el siglo XIX.
La manzana en la que se encontraba este edificio demolido a finales del siglo XIX se cortó cuando se ideó la Plaza Jacinto Benavente. Otro de los edificios que desaparecieron del mapa madrileño, por cierto, fue la Lonja de Almidón, que en su día fue la casa de cambios más conocida de Madrid. Pero al margen de esto, también se vendía chocolate, bacalao y otros productos frescos. En sus primeros años de vida, la Plaza Jacinto Benavente tuvo un ambiente más serio y distinguido, aunque el paso de los años la convirtió en un lugar distendido y con un gran ambiente.
En el año 1998, la Plaza Jacinto Benavente añade a su decoración la estatua de un barrendero. Además, en estos últimos años del pasado siglo XX, la plaza pasa a ser uno de los lugares escogidos para las ferias de artesanía en Madrid. Y así se ha evolucionado hasta la actualidad, en la que hay muchos lugares que ver que te explicamos en el siguiente punto. ¡Yo que tú no me los perdería!
Qué ver en la Plaza Jacinto Benavente de Madrid
Una escapada o un viaje a Madrid seguro que tiene una parada en la Plaza Jacinto Benavente. Allí podrás ver el Madrid más vivo. Un ir y venir de personas que te ayudará a entender lo que muchos conocen como 'vivir a la madrileña'. Pero lo que seguro que más te interesará sea detenerte en alguno de los edificios que se ubican en esta plaza. ¿Los conocemos un poco mejor? ¡Vamos a ello!
Palacio de los cinco gremios mayores
Uno de los principales edificios de la plaza es la Casa de los Cinco Gremios. Fue levantada por los comerciantes pañeros, sederos, joyeros, teleros y drogueros (o especieros), los cinco gremios pujantes de la época. El gremio perdió poder con los años, y finalmente el edificio salió a subasta pública, siendo adquirido en 1815 por el Banco de Isabel II. Manuel Ballina fue el arquitecto de un edificio que muestra todas las virtudes del arte neoclásico de Madrid en el siglo XVIII.
Los Cines Ideal de Madrid
En la Calle del Doctor Cortezo está el edificio de estos cines, que desde 1999 se llaman oficialmente Yelmo Cines Ideal. Se trata de uno de los cines más antiguos de Madrid, puesto que fue inaugurado en 1916. Se levantó donde antes estaba el Convento de los Trinitarios Calzados, un local con capacidad para casi tres mil espectadores. En su interior se conservan todavía vidrieras preciosas que son, en sí mismas, alegorías del mundo del cine. En la actualidad, es un buen lugar para un plan a cubierto en Madrid.
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Actividades en MadridEl Teatro Calderón de Madrid
Se encuentra justo en frente de los Cines Ideal de Madrid. Es uno de los edificios más bonitos del centro de Madrid. Se inauguró en 1917 con el nombre de Teatro Odeón. En 1927 se rebautiza definitivamente con el nombre de Teatro Calderón, aunque por motivos de patrocinio está sometido a algunos cambios de nombre según quién sea el que paga, puesto que a lo largo de su historia también fue llamado Teatro Häagen-Dazs Calderón y desde 2012 se llama Teatro Caser Calderón, por la empresa de seguros Caser.
El Centro Gallego de Madrid y Cruz de Santiago
Ocupa el solar en el que estaba antes la antigua Bolsa de Madrid y lo conforma un edificio que quizá no sea nada acorde con la arquitectura de la zona. El edificio se levantó en los años cincuenta y posteriormente albergó el Centro Gallego en Madrid, motivo por el cual, en las inmediaciones del mismo, se colocó un crucero o una cruz de Santiago, recordando a los peregrinos que realizan el camino de Santiago. Es una especie de centro de encuentro para todos los gallegos que se encuentran en Madrid o aquellos turistas amantes de la cultura gallega.
La estatua del barrendero de la Plaza Jacinto Benavente de Madrid
En 1998 se añadió a la decoración de la plaza un barrendero de bronce, obra de Félix Hernando García. Se trata de una bonita escultura en homenaje al personal del Servicio de Limpieza del Ayuntamiento de Madrid, que hace posible que esta zona tan emblemática y turística presente un impecable estado. El 'barrendero madrileño' une al personal de limpieza a la ciudad, y muestra que este es uno de los oficios clave para el buen desarrollo de la vida ciudadana. Por cierto, ¿sabías que para la realización de la estatua se utilizó como modelo a un amigo de su autor? El uniforme que luce es el que llevaban los barrenderos en Madrid en los años sesenta del pasado siglo.
