Plaza del Callao

El nombre de la Plaza del Callao se debe a la batalla naval del Callao, en Perú, que enfrentó en 1866 a una escuadra de la Armada Española contra la escuadra chilena y peruana. Pero antes de buscarle un nombre, también en el siglo XIX, se levantó este espacio sobre un antiguo solar formado tras el derribo de una manzana entera entre las calles Preciados y Jacometrezo. Sufrió diversos cambios de imagen durante décadas, pero siempre mantuvo sus dimensiones de 105 metros de largo y 48 de ancho.

No fue hasta finales de 2009 y principios de 2010 cuando decidió peatonalizarse la plaza que conocemos actualmente. Y desde entonces, su oferta social ha aumentado notablemente. Pero, ¿qué ver y hacer en la Plaza del Callao? Coge papel y boli, que vamos a contarte algunos de los planes más queridos por los madrileños y madrileñas y que, por supuesto, tú no te puedes perder. El edificio Cine Callao es el centro neurálgico de todo. Creado en 1926 por Luis Gutiérrez Soto, es una de las señas más conocidas de Madrid. La película 'Luis Candelas, el bandido de Madrid', lo inauguró. Más de nueve siglos después, sus taquillas y salas siguen a reventar cada día.

Otro de los edificios destacados de la Plaza del Callao es el de La Adriática, construido en 1926 por el arquitecto Luis Sainz de los Terreros. Seguro que te llama mucho la atención el torreón que corona en una cúpula y que es una de las esquinas de Callao con Gran Vía. Justo al lado se encuentra otro de los edificios más populares, el que regenta El Corte Inglés en la actualidad, y que por cierto es muy famoso por la terraza que tiene. Esta se encuentra en el noveno piso, y tiene unas panorámicas exquisitas de la Gran Vía, la Plaza España la cúpula del Teatro Real y el entorno del Palacio Real.

Y hablando de palacios... ¿Sabías que el de la Prensa se mantiene como uno de los más antiguos de Madrid? También está ubicado en la Plaza del Callao, y durante mucho tiempo, gracias a sus 14 plantas, fue el edificio más alto de la ciudad. Con la construcción del edificio Telefónica, de 88 metros de altura, este último pasó a ocupar esa primera posición de edificios más altos de Madrid. No nos olvidamos tampoco del edificio Carrión, conocido también como Capitol. 

Se edificó en 1933 de la mano de Luis Martínez-Feduchi y Vicente Eced y Eced, también con 14 pisos. Quizás sea el más famoso de todos por su eterno cartel de Schweppes que ilumina Callao y la Gran Vía. Además, desde 2018 se convirtió en Bien de Interés Cultural en reconocimiento a su valor icónico y arquitectónico. Y todos aquellos que hayáis tenido el placer de visitar Nueva York, podéis encontrarle cierto parecido con el Flatiron.

Su carácter comercial y de ocio convierte a la Plaza del Callao en un lugar de paso obligatorio de cualquier itinerario en Madrid. De hecho, resulta raro que cualquiera de las actividades en Madrid que pretendan mostrarte la ciudad no pase por aquí.Su magnífica ubicación al lado de la calle Preciados, la vía comercial más transitada de España y tercera de Europa, es uno de los mayores reclamos de la plaza.

No solo para comprar en la FNAC o en el Corte Inglés se conoce Callao, porque otro de sus puntos fuertes está vinculado al mundo del espectáculo. En la propia plaza hay dos cines, además de los teatros y locales para disfrutar de monólogos que se sitúan en plena Gran Vía madrileña. Al igual que los musicales, que nunca faltan y son un plan perfecto para ir con los más pequeños de la casa.

En cuanto a la gastronomía, es difícil decantarse por todas las opciones que se ofertan en esta Plaza del Callao. Desde el americano Five Guys que compite con McDonald’s y Burger King, hasta el clásico VIPs o el Rodilla. Sin olvidar la terraza del Corte Inglés donde la oferta gastronómica es amplia, incluso para celiacos, de la mano del Asador Imanol, Central Mexicana o La Máquina, entre muchos otros. Se ubica en el espacio Gourmet Experience Gran Vía y no es obligatorio consumir, podéis simplemente subir al noveno piso y regalaros una de las mejores vistas sobre Madrid.