Estados Unidos

Guia de viaje de

Nueva York

MoMa

El Museo de Arte Moderno de Nueva York es uno de los centros culturales más importantes del mundo. Desde su fachada, que es una obra de arte en sí misma, hasta los muchos tesoros que guarda en su interior, el MoMa se ha convertido en el museo de arte moderno más importante y relevante del mundo. ¡No te lo puedes perder!

Conoce el espectacular Museo de Arte Moderno de Nueva York

El Museum of Modern Art o Museo de Arte Moderno de Nueva York es una de las atracciones más visitadas de la Gran Manzana. Se trata de un centro cultural único en el mundo que alberga muchas de las obras más importantes de la historia. El templo al arte y la cultura moderna más grande Nueva York. Un centro que os va a sorprender y que es una de las paradas obligadas en vuestra visita a la ciudad.

Historia del Museo de Arte Moderno de Nueva York

La historia del Museo de Arte Moderno de Nueva York está llena de dificultades. Pese a ello, este centro ha sabido soportar los duros tiempos que le tocó vivir a la ciudad. También reinventarse en varias ocasiones, de modo que nunca ha perdido su atractivo de cara al público. Por ello, desde su apertura en el año 1929, este espacio ha atraído a millones de personas, maravillados por las joyas de arte moderno que allí se encuentran.

Pero regresando al principio, el MoMa de Nueva York se originó en los años veinte, abriendo sus puertas por primera vez el siete de noviembre de 1929. Tres filántropas de los Estados Unidos, Lillie P. Bliss, Mary Quinn Sullivan y Abby Aldrich Rockefeller, fueron las encargadas de dar vida a un centro que pretendía recopilar las obras más impresionantes de arte moderno.

En el interior del MoMa te encontrarás con las obras más importantes del mundo

La primera sede en la que se instaló el museo fue la Grand Central Terminal, en el Heckscher Building. Allí se instaló por primera vez el Museo de Arte Moderno de Nueva York. Hoy en día, el edificio Heckscher ha sido renombrado como ‘The Crown Building’. Pero regresando a los años veinte, en los primeros años de vida del museo, la entidad, que nació como pública, se nutrió de las donaciones que le llegaban de particulares

Era una época de felicidad, tras el horror de la Primera Guerra Mundial. Nueva York seguía experimentando un crecimiento espectacular, pero la innovación de sus calles y rascacielos no venía acompañada de un centro cultural que expusiese todo el arte moderno de la época. Por ello, su apertura, pese a venir acompañada del crac del 29, fue acogida con gran éxito por parte de todos los ciudadanos. 

Un buen ejemplo de ello es que, en sus primeros diez años de vida, el MoMa se trasladó hasta tres veces. Miles de personas lo visitaban cada día, por lo que todas las sedes parecían quedarse pequeñas. Finalmente, en 1939, se trasladó al número 11 de la calle 53, el lugar en el que se encuentra hoy en día.

Tras la Segunda Guerra Mundial, el Museo de Arte Moderno de Nuevo York trató de reinventarse, ofrecer nuevas obras y hacerse con las joyas más codiciadas del mundo en lo que a arte moderno se refiere. Por todo ello, no tardó en consolidarse como uno de los más relevantes de la Gran Manzana. Aunque el museo contaba con una gran colección propia, no tardó en hacerse con las obras más representativas de importantes artistas, sobre todo franceses, de finales del siglo XIX y principios del siglo XX.

Te encantará descubrir todas las salas y plantas que forman el Museo

Philip Goodwin, en colaboración con Edward Durell Stone, fueron los encargados de dar forma al nuevo edificio que iba a albergar el museo. Una construcción innovadora y modernista que daba buena fe de lo que uno se iba a encontrar dentro. Seis pisos cuya fachada de cristal no pasaba desapercibida para nadie. Conforme pasaban los años, el MoMa creció en importancia y obras. Las joyas de arte moderno llegaban desde todos los lugares del mundo

El comienzo del nuevo siglo XXI trajo consigo la celebración de los 75 años del Museo, en el que se iniciaron unas importantes obras de expansión que se extendieron entre el año 2001 y el 2004. De este modo, el MoMa entraba a lo grande en el siglo XXI. Actualmente, las obras más complejas y bonitas que puedas imaginar se encuentran aquí. Y lo hacen en varios formatos, incluido el arte digital. 

Toda esta historia ha llegado hasta nuestros días como un pasado legendario que nos regala uno de los centros culturales más importantes del mundo. Visitar el MoMa es toda una experiencia, por lo que en tu viaje a Nueva York es algo que no te puedes perder. Es cierto que, al igual que todos los negocios del mundo, tuvo que cerrar en el año 2020 debido a la pandemia de Coronavirus. Pero os podemos asegurar que ha reabierto con más ganas que nunca. ¡Ven y compruébalo!

Qué ver en el MoMa

El MoMa exhibe las colecciones de arte moderno más importantes del mundo. A su enorme colección permanente, en la que destacan obras como ‘La Noche Estrellada’ de Van Gogh o ‘Las Señoritas de Aviñón’ de Picasso, de las que luego hablaremos, también te puedes encontrar con exposiciones temporales sensacionales. Debes saber, eso sí, que dado su tamaño, vas a necesitar varias horas para conocer el MoMa al completo. Y antes de ir con las obras, vamos a darte una pequeña pista: las obras de los artistas más relevantes de la historia están en las plantas cuarta y quinta del Museo.

Obras que no te puedes perder en el MoMa

Del Museo de Arte Moderno de Nueva York no puedes perderte nada. Todo lo que allí se encuentran son obras de un valor incalculable, por lo que está claro que te recomendamos que lo recorras al completo. Pese a ello, como en todos los sitios, sí que hay obras que se alzan por encima del resto. Vamos a conocerlas todas. 

  • Noche estrellada (1889). Vincent Van Gogh fue el autor de esta mítica obra de arte postimpresionista.  Se trata de una representación de lo que veía desde la ventana este de su habitación en Saint-Rémy-de-Provence.
¡No te pierdas ninguna de las obras de arte que se encuentran en el MoMa!
  • Los nenúfares (1898-1926). Casi tres décadas dedicó Claude Monet a una de sus obras más representativas. Se trata de una obra inspirada en su jardín de Giverny. El Museo de Arte de Nueva York te encontrarás con un magnífico tríptico que puedes ver en una sala dedicada a esta obra.
  • La danza (1909). Tiene dos versiones, una en el MoMa, con colores más pálidos y menos detalles, y otra en el Museo de San Petersburgo. Ambas son obra de Henri Matisse, que representó a un grupo de cinco personas de ambos sexos completamente desnudos y formando un círculo en el que bailan cogidos de la mano.
  • Lata de sopa de Campbell (1962). Es una de las obras más conocidas de la historia y una de las más icónicas de la carrera de Andy Warhol, su autor. Este fue el comienzo de las obras de repetición en serie que inició el autor sobre los productos básicos de América. Las 32 latas de sopa se exponen en una sola línea, como se hizo por primera vez en la Galería Ferus en Los Ángeles.
  • La persistencia de la memoria (1931). El español Salvador Dalí realizó esta escultura, también conocida como los relojes blandos o derretidos. Y es que representa eso. Un reloj derretido en un árbol con un mar de fondo. En el centro de la figura aparece una especie de cabeza blanda con una enorme nariz y cuyo cuello parece diluirse en la oscuridad.
  • Las señoritas de Avignon (1907). Se trata de una obra del pintor español Pablo Picasso. Las tres figuras que en él aparecen se representan de una forma irreal, sin sombras ni luces. La variedad de colores utilizados os sorprenderá. Las dos figuras del centro parece que nos miran desde arriba.
Te quedarás impresionado con la relevancia e importancia de las piezas del MoMa
  • Estación de Gas (1940). El pintor estadounidense Edward Hopper es el autor de esta obra en la que se representan tres estaciones de servicio de gasolina vistas por el artista. Una representación de la época realista del autor que se encuentra en la planta quinta del MoMa. Es decir, una obra a la que se da la máxima relevancia e importancia.
  • Interior holandés (1928).  Joan Miró es el autor de esta obra. El artista se inspiró en la pintura holandesa del siglo XVII después de un viaje a Bélgica y los Países Bajos. Como resultado, salió una de las obras más representativas de la colección de este genio. 
  • Los amantes (1928). El autor de la obra es Rene Magritte. Esta es la primera de las obras de Les Amants que pintó el artista. En ella se representa un beso en primer plano con los rostros de los protagonistas recubiertos de telas. Una escena en la que se oculta la identidad, consiguiendo que todos pongan su interés en descubrir quiénes se esconden tras las telas.
  • Autorretrato con pelo cortado (1940). Frida Kahlo fue la autora de este cuadro, en el que se representa a ella misma tras su divorcio con Diego Rivera. De este modo, se busca representar cómo cambia la vida de la artista después de la separación. Ella misma aparece en el centro del cuadro con un traje negro. Fue la primera obra de la artista en el MoMa.
  • La canción de amor (1914). Es una de las obras más conocidas del pintor Giorgio de Chirico. El autor, uno de los máximos exponentes del realismo, busca representar lo que hay más allá de la propia apariencia, en una época oscura y sombría para la humanidad debido al estallido de la Primera Guerra Mundial. 
  • Retrato de retrato de Adele Bloch-Bauer (1912). Fue Gustave Klimt quien pintó dos retratos de Adele Bloch-Bauer, la esposa de un conocido empresario de la élite de Viena. La obra la representa en el centro de la imagen con un lujoso vestido y un fondo formado por una vistosa decoración con colores vivos que llaman la atención de todos. 
  • Instructions for Paintings (1962). Yoko Ono dejó para la historia esta obra de arte en la que se puede observar una selección de normas, consejos e instrucciones para pintar. Conocido también como ‘El Cuadro para ser Pisado’, el texto que se puede ver en japonés dice lo siguiente: “Deja un trozo de lienzo o pintura terminada en el suelo o en la calle”.

Cómo se distribuye el MoMa

Tal y como os adelantamos anteriormente, el actual edificio del Museo de Arte Moderno de Nueva York se divide en seis plantas. En todas ellas puedes ver y aprender con las obras de arte que allí se encuentran, pero el grueso de la colección se encuentra en las plantas 2, 3, 4 y 5. La primera planta, por la que accederás al centro, se utiliza para la recepción, las taquillas, el jardín de esculturas y el restaurante que allí se encuentra

Conforme vamos subiendo, nos encontraremos con diversas salas que acogen las obras de las diferentes épocas de la historia del arte. Por ejemplo, en la segunda planta se encuentran los grabados, medios audiovisuales, pinturas y obras de 1980 en adelante. Además la tienda y la cafetería del MoMa también se encuentran en este segundo piso. En el tercero podrás ver dibujos, fotos y diseños de varias épocas.

Un recorrido por el Museo supone una experiencia única e inolvidable

La pintura y escultura entre 1940 y 1980 se encuentra en la cuarta planta. De este modo, aquí se encuentran las obras de Andy Warhol o Jackson Pollock, entre otros. En el quinto piso se encuentran las pinturas y esculturas realizadas entre 1880 y 1940. Probablemente, esta sea una de las zonas del museo que más te gusten. ya que aquí se encuentran firmas como la Picasso, Van Gogh, Monet, Frida Kahlo o Mondrian

En la sexta y última planta del museo te encontrarás con otra tienda, aunque algo más pequeña que la de la segunda planta, y exhibiciones especiales y temporales que el Museo de Arte Moderno de Nueva York organiza cada año. Por todo ello, este centro cultural es uno de los imprescindibles de la Gran Manzana. ¡Os lo vais a pasar en grande mientras descubrís los mayores tesoros del arte moderno!

Ubicación del MoMa

Detalles

    Horario

    • Todos los días: 10:30 a 17:30

    Precio

    • Adultos (16-64): 24,42€
    • Mayores de 65 años: 17,58€
    • Estudiantes mayores de 16 años: 13,67€
    • Menores de 14 años: Gratis

    Lugares cercanos

    • Catedral de San Patricio
    • Rockefeller Center
    • Central Park
    • Quinta Avenida

Cómo llegar al MoMa

    Metro

    • Paradas '5 Avenue-53 St Station'; '57 Street'

    Bus

    • Paradas '5 Av/W 51 St'; '5th Ave/51st St'; '6 Av/W 55 St'; '6 Avenue & 56 St'; 'West 57 Street & 6 Avenue'