Hungría

Guia de viaje de

Budapest

Fin de semana en Budapest

La Gran Dama del Danubio también se puede disfrutar en un mágico fin de semana. Es cierto que a todos nos gustaría poder quedarnos mucho más que tres días en las ciudades que visitamos, pero no tenemos ninguna duda que, gracias a esta pequeña ayuda que os facilitamos, vais a aprovechar al máximo vuestra estancia en la capital húngara. ¡Descubre los mejores planes!

Vista del Castillo Vajdahunyad

Aunque creas que un fin de semana no da para mucho, te aseguramos que puedes visitar Budapest en tres días. Te ofrecemos los mejores planes para que puedas ver todo lo imprescindible de Budapest en tres trepidantes días que te dejarán enamorado para siempre de esta perla húngara. Como siempre, buscamos facilitar tu viaje lo máximo posible, por lo que trataremos que no nos falte ningún imprescindible por mencionar. ¿Quieres conocer Budapest en tres días? Este es tu artículo. ¡Acompáñanos a descubrirlo!

Día 1 en Budapest

Nuestra bienvenida a la ciudad será de lo más intensa. Porque desde el primer instante en el que pongamos un pie en la misma, ya tendremos a nuestro alrededor multitud de joyas que seguro querrás conocer y visitar. Pero vamos a tratar de llevar un pequeño orden. Tu fin de semana en Budapest podría comenzar en el Parlamento de Budapest, el edificio más conocido de la ciudad y uno de los parlamentos más grandes del mundo

Además, a lo largo de este apasionante primer día en la capital húngara, también tendremos tiempo de ver algunos de sus monumentos más emblemáticos. Es el caso de los Zapatos del Danubio. Una escultura que representa setenta pares de zapatos que recuerdan la barbarie cometida contra los judíos de la ciudad en la Segunda Guerra Mundial. Budapest cuenta con numerosas esculturas a lo largo de sus calles, ¿quieres saber cuáles? Te lo contamos aquí.

El Puente de la Libertad es otro de los lugares con más encanto de la localidad, dada su belleza y las vistas que nos deja del Danubio. 

El Mercado Central, el más grande y antiguo de Budapest, es otra de las paradas obligatorias en tu primer día en la ciudad.  También la plaza Vorosmarty, uno de los lugares más relevantes de la capital húngara, en la que descubrir la esencia y modo de vida de los habitantes de Budapest. Un espacio muy animado en el que nos encontraremos con multitud de cafeterías, restaurantes, tiendas y monumentos que nos acercarán al ocio e historia de la localidad.

El Puente de las Cadenas, el más longevo de la capital húngara, es otro de sus símbolos. Construido e inaugurado en el siglo XIX, fue el principal nexo de unión entre Buda y Pest, justo antes de su unificación. Eso sí, este puente tuvo que reconstruirse después de la Segunda Guerra Mundial, ya que los nazis lo habían volado. Muy cerca de allí nos encontraremos con el Castillo de Buda, que fue residencia de los reyes de Hungría. Aunque hoy en día tiene otros usos, es una de las paradas obligatorias en vuestro viaje a Budapest.

Y está claro que de Budapest no te puedes marchar sin conocer uno de sus grandes atractivos: los baños termales. Porque, ¿a quién no le apetece darse un baño mientras nieva? Uno de los balnearios más conocidos de la ciudad es el Gellert. Cuenta con más de un siglo de historia, y es un lugar que a los turistas les gusta conocer, y también darse un buen chapuzón en su sensacional piscina. Y para conocer todas estas maravillas, no hay mejor manera de hacerlo que con quienes más saben, y estas personas son las encargadas de hacerte disfrutar en nuestros Free Tours por Budapest.

Además, para acabar este maravilloso primer día en la ciudad, podrás acabar la noche en uno de los ruin bar de Budapest. Se trata de locales con mucho encanto en los que disfrutar de las mejores copas de la ciudad. En el Barrio Judío encontraremos un buen número de estos lugares. 

Día 2 en Budapest

Tras un primer día de emociones, toca descansar, reponer fuerzas y levantarse con el mayor de los ánimos para afrontar una segunda jornada impresionante por las calles y monumentos de la ciudad. Una de las mejores de arrancar esta segunda jornada en la capital húngara es hacerlo con una visita a uno de sus lugares más emblemáticos: el Barrio Judío. Precisamente, será aquí donde te encuentres con la Gran Sinagoga de Budapestuno de los edificios más emblemáticos de toda la ciudad, ya que estarás ante la segunda sinagoga más grande del mundo.

Vista de la Gran Sinagoga de Budapest

Pero este será solo el comienzo. Tenemos que visitar las calles más increíbles y transitadas de la ciudad. La Avenida San Esteban es una de ellas, ya que aquí nos encontraremos con la Basílica-Catedral de San Esteban. Un increíble templo católico construido en el siglo XIX y que es, junto al Parlamento, el edificio más alto de la ciudad. A través de la Avenida Andrássy llegarás a los puntos más relevantes de la ciudad, por lo que no se nos ocurren calles más importantes que esta.

Otra de las paradas obligatorias en este segundo día por la ciudad es la Ópera de Budapest, que se esconde tras un edificio monumental, de estilo neorrenacentista e imprescindible en vuestro viaje. Las 16 esculturas de su fachada os darán la perfecta bienvenida a una construcción histórica y emblemática. Además, muy cerca de allí, la plaza de los Héroes te espera para que puedas maravillarte con el lugar más representativo de la ciudad. Allí te encontrarás con las estatuas de los fundadores del país, siendo todo el conjunto arquitectónico de este lugar Patrimonio de la Humanidad.

También debemos hacer una parada en el parque Városliget, la mejor zona verde de la ciudad y un lugar de ocio, entretenimiento y relax para los habitantes de la ciudad. Aquí encontrarás lugares de mucho interés como el Balneario Széchenyi y el Castillo Vajdahunyad, que es precisamente otro de los imprescindibles, ya que su belleza le hace ser una de las principales atracciones turísticas de la localidad, y su arquitectura te trasladará a Transilvania y al palacio de Drácula. 

Y si te decíamos que en Budapest son tan populares los baños termales, en este segundo día en la ciudad no puedes perderte el Balneario Széchenyi. Te encantará uno de los espacios termales más grandes de toda Europa. Con más de un siglo de vida, tiene 15 piscinas. En las de fuera tendrás la oportunidad de estar metido en el agua, a unos 37ºC, en plena noche. Y por último, para completar esta segunda jornada en la capital húngara, te damos algunas recomendaciones, como conocer una de las cafeterías históricas de la ciudad. La Nueva York, en concreto, es la más bonita de todo Budapest.

Día 3 en Budapest

Nuestro tercer día en Budapest puede arrancar con la tristeza de saber que ya nos tenemos que ir, pero no puedes pensar en eso. Hay que disfrutar al máximo de otro increíble día en la capital húngara, en el que os tenemos preparados multitud de planes que os van a maravillar. Visitar Isla Margarita es uno de ellos, ya que te encantará estar en un parque único ubicado en pleno Danubio, entre las antiguas Buda y Pest.

El puente de Elisabeth es el que lleva el nombre de la reina Isabel de Habsburgo. Su moderno diseño le hizo ser uno de los grandes atractivos de la ciudad hasta que los nazis lo bombardearon y derribaron al completo. Tras ser reconstruido, se ha mantenido hasta hoy en día como el puente con mayor tráfico, con tres carriles en cada sentido. Lejos de los coches, el Monte Géllert y Ciudadela son imprescindibles de ver y visitar. Allí te maravillarás con el Monumento a la Liberación o un búnker de la Segunda Guerra Mundial

Ambiente en el Szimpla Kert, uno de los Ruin Bar más famosos de la ciudad

Y antes de finalizar nuestra estancia en la capital húngara, tenemos que conocer el Santuario de Lourdes, que se encuentra también en el Monte Géllert,  excavada en uno de los lados de la ladera de la colina. En su interior se puede encontrar una copia de la Virgen Negra de Czestochowa y una pintura de un monje polaco de gran valor artístico.

La memoria de todos los inocentes que fueron asesinados por los nazis se recuerda de la forma más respetuosa en el Museo del Holocausto de Budapest, que rememora la etapa más oscura en la ciudad. Conocerás la historia de los miles de judíos inocentes que fueron asesinados por los nazis desde 1938 y hasta el final de la Segunda Guerra Mundial. Te encontrarás con paneles de información acerca del Holocausto, que también se explica a través de múltiples pantallas. Este está considerado como el mejor museo del mundo dedicado a este oscuro periodo de la historia

Por último, antes de marcharte, te proponemos redondear tu fin de semana visitando el Memento Park, a unos 12 kilómetros del centro de la ciudad. Se trata de un conjunto de 42 estatuas de la época soviética que supone el único recuerdo comunista que queda en la ciudad. Tras la caída de la URSS y la llegada de un nuevo régimen, todas las estatuas se llevaron a este lugar diseñado por el arquitecto húngaro Arkos Eleod. Te impresionará un lugar inmenso lleno de historia.