Piazza del Duomo

Siendo uno de los puntos más emblemáticos de Florencia, está claro que no nos podemos perder nada de la Piazza del Duomo. Es un lugar de obligatoria visita cuando llegamos a la ciudad. Al margen de todas las obras de arte que allí te encontrarás, su ubicación es privilegiada, ya que conecta los puntos más relevantes de Florencia. Historia, religión, arquitectura, arte y cultura se combinan en el corazón de la capital de Toscana. ¡Ven a visitarla!

Además de maravillarnos con su interior podremos subir al mismísimo Duomo de esta obra gótica en nuestra visita a Florencia, donde tendremos una de las mejores panorámicas de la ciudad. La cúpula en sí se extiende durante 45 metros de ancho y fue construida por Brunelleschi tras haber ganado un reto contra Ghiberti, autor de las puertas del paraíso. 

En el interior de la Catedral nos meteremos en un viaje increíble a través de la historia del arte. 3.600 metros cuadrados repletos de frescos de los artistas florentinos más destacados, como Paolo Uccello, Andrea del Castagno o Giorgio Vasari. También veremos la monumental obra de Federico Zuccari, 'El Juicio Final'. ¡Os dejará sin palabras!

Además, siguiendo nuestro recorrido por su interior, conoceremos el impresionante Altar Mayor, a cuya izquierda se encuentra la Capilla de la Luz. Recibe este nombre porque en ella verás el reflejo de un reloj solar que indica el momento del solsticio y se sitúa a 90 metros del suelo. Dentro de la Catedral también se encuentra la cripta en la que están enterrados los obispos florentinos que han pasado por Santa María del Fiore.

Otro coloso de la plaza, en la misma Catedral, es el campanario de Giotto. Su construcción comenzó en 1334 y fue completada en 1359. Los elementos que lo decoran son una auténtica delicia visual: 56 relieves y 16 estatuas nos cuentan la historia de este lugar que acompaña a la Catedral de Florencia haciendo un monumento único.

Baptisterio de San Juan

Se podría decir que este es el tercer elemento más importante dentro de la Piazza del Duomo. Se ubica justo en frente de la fachada de la Catedral de Santa Maria del Fiore. Está dedicado a Juan Bautista, y es otro de los sitios que hay que visitar sí o sí en el viaje a Florencia. 

Su construcción arrancó en el siglo XI, por lo que tiene un origen exculsivamente románico. De planta octogonal, tiene la decoración clásica florentina, estando decorado en su interior por imponentes frescos de los artistas locales más destacados de la historia. 

Coppo di Marcovaldo o Cimabue dejaron su imronta con obras de arte de los siglos XIII y XIV de un grandísimo valor artístico y patrimonial. Pero, sin duda, el espacio más conocido del Baptisterio son sus puertas. Conocidas como las Puertas del Paraíso, están formadas por 28 paneles de bronce en las que se trata la vida de San Juan Bautista, así como algunas virtudes como la fe o la esperanza. Fueron diseñadas por Andrea Pisano y esculpidas por Ghiberti.

Regresando al exterior, los ocho lados que forman el Baptisterio son iguales, y representan los ocho días para la Resurrección de Cristo. Todos los lados se revisten de un sensacional mármol blanco con detalles de la época romana. Además, en el exterior del Baptisterio también nos encontraremos con varias estatuas de artistas como Andrea Sansovino, Giovan Franceso Rustici o Vincenzo Danti. 

Por último, hay que hablar del sensacional mosaico que te encontrarás en su techo. Data del siglo XIII, y es obra de muchos artistas venecianos desconocidos. En él se representa el Juicio Final, las recompensas de los que se salvan y los castigos a los condenados. Además, las imágenes también cuentan otras historias, como historias del Libro del Génesis, historias de María y Cristo o historias de San Juan Bautista.

Museo dell'Opera

Ubicado también en la Piazza del Duomo, es otro de los centros que no te puedes perder en tu visita a Florencia. Un lugar repleto de historia y obras de arte que te conquistarán para siempre. En concreto, este museo está dedicado a la escultura, manteniendo en su interior una sala completa dedicada a la obra de Brunelleschi. 

Además, a lo largo del Museo dell'Opera también podrás ver la Piedad Florentina de Miguel Ángel, Profeta Habacuc de Donatello y la Virgen de los ojos de cristal de Arnolfo di Cambio, entre otras obras. Os encantará poder completar un tour por todas sus salas. 

Tienes que saber que dentro del Museo dell'Opera contiene una amplia variedad de piezas originales de la Catedral, el Baptisterio y el Campanario. Actualmente, en el interior de estos puntos se encuentran copias por motivos de seguridad. Pero si realmente quieres poder ver de primera mano los originales, ven a este museo y disfruta de ellos. 

El Museo dell'Opera está situado detrás de la cúpula de la Catedral. Su interior se guarda sobre las paredes de un antiguo palacio en el que también trabajaron artistas tan destacados como Donatello y Brunelleschi. Además, este lugar fue en el que Miguel Ángel hizo su David. 

Y antes de finalizar este punto, no podemos dejar de mencionar otros de los edificios más increíbles que se encuentran en la Piazza del Duomo. Estos son la Loggia del Bigallo, el Palazzo dei Canonici, el Palazzo Arcivescovile, el Palazzo Strozzi di Mantova, el museo Torrini, la Torre dei Marignolli, la Opera San Giovanni y la Venerabile Arciconfraternita della Misericordia. Como podéis ver, la Piazza del Duomo es un imprescindible de tu visita a Florencia.

Los frescos y tallas que te encontrarás en el Campanario de Giotto representan el orden universal y la Creación del Hombre. Además, también te encontrarás con 16 estatuas colocadas en varios nichos. Para subir a la parte más alta del campanario, debes saber que te tocará subir 441 escalones. 

En cuanto a la decoración, algunos de los pisos están decorados con increíbles ventanas que dejan a entrever elementos góticos de mucho valor. Una vez arriba, te encontrarás con siete campanas. La mayor recibe el nombre de Santa Ana, mientras que las otras seis tienen el nombre de Misericordia, Apostolica, Assunta, Mater Dei, Annunziata e Immacolata. 

El Campanario de Giotto es uno de los monumentos más increíbles de Florencia, por lo que si quieres que tu visita a la ciudad sea lo más completa posible, no puedes perderte la oportunidad de conocer su historia y arquitectura.