Basílica de Santa María Novella
Considerada la primera gran basílica de Florencia, la de Santa María Novella es también la principal basílica dominicana, con sus frescos góticos y renacentistas financiados por las familias florentinas más importantes.
Construida a lo largo de los siglos XIII y XIV por orden de los frailes dominicos, los colores de mármol de la fachada recuerdan a los del monumental Duomo y la encantadora iglesia de Santa Croce. Todo, desde las capillas hasta la Santísima Trinidad de Masaccio y las vidrieras, es impresionante y merece la pena visitar su interior.
Historia de la Basílica de Santa María Novella
La Basílica de Santa María Novella fue fundada en 1279 por una orden dominicana, la cual era similar a la franciscana y adoptaba como lema la pobreza, la caridad y la predicación. Los dominicos eras justicieros bastante severos y su misión era predicar y erradicar la herejía.
Se cree que la parte inferior de la fachada de mármol, que es de estilo románico, fue ejecutada por Fra Iacopo Talenti da Nipozzano, mientras que la parte superior se completó 100 años después por Leon Battista Alberti. Por lo tanto, la fachada no solo es la más antigua de todas las iglesias de Florencia, sino que también es la única iglesia con su fachada original planificada que todavía está en su lugar a día de hoy.
La parte superior de la Iglesia de Santa María Novella tiene incrustaciones de mármol verde de Prato, conocido también como serpentino. Se realizó un amplio friso con cuadrados, y la parte superior se completa con cuatro pilastras blanco-verde junto con una ventana redonda.
El frontón con el escudo solar dominico y flanqueado a ambos lados por enormes volutas en forma de S, es el remate de la basílica. Debajo del frontón hay un friso que lleva el nombre del patrón: Giovanni Rucellai.
Arquitectónicamente, es una de las iglesias góticas más importantes de la Toscana. Su interior alberga extraordinarias obras de arte como el ciclo de frescos de Ghirlandaio en la Capilla Tornabuoni, la Trinità de Masaccio o el Crucifijo de Giotto, entre otras.
Qué ver en la Basílica de Santa María Novella
El interior de la basílica es enorme y parece incluso más larga de lo que es gracias a la inteligente coloración de los arcos centrales. Dicho diseño se supone que es obra de Brunelleschi.
Te contamos cuáles son las cosas que no te pueden perder dentro de la Iglesia de Santa María Novella y su museo-convento. Fundado a principios del siglo XX, el museo incluye dos claustros la Capilla Española y un enorme refectorio con una pintura de la Última Cena.
En el siglo XVI, el Duque Cosimo I de Médici ordenó a Vasari que le diera a la iglesia un cambio de imagen renacentista. Entre otras cosas, se quitó el alto biombo, que separa al claro y a los laicos, y se cubrieron con yeso algunos frescos que estaban deteriorados.
Capilla Filippo Strozzi
Los Médici desterraron a la familia Strozzi de Florencia tres veces. Para ayudar a restaurar la reputación dañada de los Strozzi, estos se involucraron en algunos proyectos de construcción.
La Capilla Filippo Strozzi es una de las capillas principales de la iglesia, justo a la derecha del altar mayor. La capilla tiene unos frescos preciosos de Filippino Lippi, una luminaria del Renacimiento temprano. Los pinto a finales del siglo XV, y su finalización se retrasó porque el artista fue llamada a Roma para trabajar en la Capilla Carafa en Santa María Sopra Minerva. Estos frescos representan la vida de los apóstoles Santiago y Felipe.
El crucifijo de bronce del Altar Mayor es del escultor Giambologna. Las vidrieras fueron creadas a también a finales del siglo XV por Alessandro Agolanti, basándose en dibujos de Ghirlandaio.
Capilla de Tournabouni
Detrás del Altar Mayor está esta capilla encargada a un familiar de los Médici, con una serie de frescos producidos por Ghirlandaio y su taller, en el cual se dice que podría haber estado el joven aprendiz del artista, Miguel Ángel. Los frescos de la pared trasera central son retratos de Tournabouni y su esposa, y se dice que los tres jóvenes en la escena de María visita a Santa Isabel son obra de Miguel Ángel.
La pared izquierda muestra la vida de la Virgen. El Nacimiento de la Virgen es especialmente luminoso, y la escena más conocida de la ermita. La pared derecha muestra la vida de San Juan Bautista, patrón de Florencia.
Capilla Strozzi
Esta otra Capilla Strozzi está dedicada a Santo Tomás de Aquino y perteneció a otra rama de la familia, que vivían en la ciudad de Mantua, en el norte de Italia. La capilla fue decorada a mediados del siglo XIV por Andrea y Nardo di Cione. Lo que más llama la atención de ella es la pintura del altar independiente, además de las paredes decoradas con frescos que representan el infierno y el paraíso.
El tema del mural de las vidrieras es el Juicio Final, donde los ángeles tocan las trompetas y portan los instrumentos de la pasión de Cristo. María y Juan el Bautista están flanqueados por 6 apóstoles cada uno. Debajo de ellos, los encadenados y los salvados están separados.
Trinità de Masaccio
Está en la pared del fondo justo frente a ti cuando entras en la Iglesia de Santa María Novella por la puerta lateral. La Trinidad de Masaccio es una de las primeras pinturas que demuestran el dominio de la perspectiva, convirtiéndose en una obra maestra innovadora que anunciaba enfáticamente la llegada del Renacimiento.
La sensación de profundidad y los detalles arquitectónicos de la pintura son notables. Masaccio usó muchas formas de la arquitectura romana antigua: cofres, columnas, bóveda de cañón, capiteles y un arco triunfal. El realismo de la figura de Jesucristo también fue revolucionario.
Otra cosa que llama la atención de la obra es que la Virgen María no está representada como una niña como en tantas otras pinturas; en la Trinità es mayor y claramente una madre.
Crucifijo de Giotto
En lo alto, en el centro de la nave, hay un gran crucifijo pintado por Giotto. Es una obra temprana de alrededor de 1280. Es la obra de arte relevante más antigua de la Basílica de Santa María Novella.
Si bien es un trabajo temprano, puedes observar la maestría del artista en el sombreado del cuerpo de Cristo, las ondas que forma su cabello, la sangre derramándose y los detalles en el tapiz de fondo.
Crucifijo de Brunelleschi
La capilla Gondi a la izquierda del altar principal cuenta con un Crucifijo de madera de Brunelleschi que completó en competencia con su amigo Donatello. Brunelleschi vio el crucifijo que Donatello había creado para la Capilla Bardi en Santa Croce y se dice que expresó que el Cristo parecía “un granjero en una cruz”. Dijo que Cristo era un hombre, pero no cualquier hombre y se dispuso a mostrar lo que quería decir con eso.
El resultado es este Crucifijo en la Basílica de Santa María Novella: tallado en madera y luego pintado, con una majestuosa inclinación de cabeza y un tallado realista y detallado de los músculos del cuerpo de Jesús.
Capilla Española en el Claustro Verde
Construida hacia mitad del siglo XIV, la Sala Capitular es más conocida más bien como la Capilla Española. Está ubicada en el Claustro Verde y es una de las joyas escondidas más subestimadas de Florencia. Era donde se reunían los monjes y discutían de asuntos internos o tenían confesiones colectivas.
Esta sala fue también escenario del juicio contra Santa Catalina de Siena, famosa seguidora de San Francisco de Asís, a la que se le atribuye haber ayudado a devolver el papado a Roma desde Avignon, y fue acusada de herejía por tener visiones divinas y trabajar por mandato de Dios. Finalmente, fue absuelta del juicio y está representada en uno de los frescos con su hábito franciscano.
La Capilla Española fue encargada por Guafalotti, patrón rico que vivía cerca de la iglesia y que dejó en su testamento el dinero para la construcción y decoración del espacio. Los frescos pintados en la sala son una especie de propaganda dominicana, llenos de información y enseñanzas religiosas que muestran la muerte, pasión y resurrección de Cristo. El tema central es la salvación por Cristo, con la ayuda y el conocimiento de los dominicos.
La Última Cena de Plautilla Nelli
La monja dominicana Plautilla Nelli creó una adición innovadora al género de la Última Cena. Muy adelantada a su tiempo, fue una pintora autodidacta que dirigía un taller de mujeres artistas en el convento de Santa Caterina.
En 1568, se embarcó en su proyecto más ambicioso. Una pintura monumental de La Última Cena con representaciones a tamaño natural de Jesús y los doce apóstoles. Probablemente, la primera mujer en la historia en pintar esta icónica escena.
En 2015, el trabajo de Nelli fue minuciosamente restaurado durante cuatro años. Se presentó por primera vez al público en 2019, después de 450 años. La obra cuelga en el museo de la Basílica de Santa María Novella con obras maestras de Ghirlandaio, Masaccio y Brunelleschi.
Ubicación de la Basílica de Santa María Novella
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Basílica de Santa Maria Novella
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P.za di Santa Maria Novella, 18
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Detalles
- Lunes a Jueves y Sábado - 09:00 a 17:30 h
- Viernes - 11:00 a 17:30 h
- Domingo - 13:00 a 17:30 h
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- Sábado - 09:00 a 17:30 h
- Domingo: 12:00 a 17:30 h
- Lunes a Viernes - 09:00 a 19:00 h
- Viernes - 11:00 a 19:00
- Sábado: 09:00 a 17:30 h
- Domingo: 12:00 a 17:30 h
- Adultos: 7.50 €
- 11-18 años y >65 años: 5 €
- <11 años y personas con movilidad reducida: gratuita
Horario
Octubre a Marzo
Abril a Junio
Julio y Agosto
Septiembre
Precio
Cómo llegar a la Basílica de Santa Maria Novella
- Parada: Stazione Santa Caterina
- Parada: Unità