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Florencia

Galería de la Academia

La Galleria dell´Accademia es el segundo museo más visitado de Florencia y la atracción principal, el David de Miguel Ángel, es considerada una de las obras más importantes jamás creadas. Pero, la Academia es mucho más que esto...

La escultura del David de Miguel Ángel es el foco de todas las miradas en la Galería de la Academia.

Si estás pensando en visitar la Galería de la Academia, lo más probable es que tu objetivo sean las magníficas esculturas gigantes de mármol de Miguel Ángel. Pero, si exploras el museo con un poco más de tiempo, este te ofrecerá mucho más en las salas menos concurridas, satisfaciendo cualquier curiosidad por la botánica, la música, los símbolos artísticos y las técnicas de pintura.

Historia de la Galería de la Academia

La Galería de la Academia parece bastante modesta desde el exterior; sin embargo, este edificio es uno de los museos más importantes de toda Florencia. Curiosamente, no siempre tuvo la intención de ser un museo. En el siglo XVIII, el Gran Duque Pedro Leopoldo de Lorena estableció la institución como centro de enseñanza para la Academia de Bellas Artes, además los salones del edificio albergaban un hospital y un convento.

Con el paso de los años, la galería se fue enriqueciendo con esculturas y pinturas recogidas en monasterios y conventos suprimidos por el Gran Duque, incluso el propio Napoleón “trabajó” para ampliar la colección de la Academia. Es a finales del siglo XIX, cuando se traslada la estatua del David de Miguel Ángel de la Piazza della Signorina a la Accademia con fines de conservación.

Hacia finales del siglo XIX y principios del XX, la Galleria dell’Accademia sufrió una gran reorganización enviando algunas de sus pinturas a otros museos. Al mismo tiempo, algunas de las otras obras maestras de Miguel Ángel se unieron a la colección. El Salón de los Colosos y las Habitaciones de estilo bizantino se abrieron en la década de 1950 y presentan más de 1.300 pinturas en paneles.

Qué ver en la Galería de la Academia

Claro, el David de Miguel Ángel es la razón principal por la que muchos visitan la Academia, pero no es la única obra dentro de sus paredes que vale la pena admirar. A medida que avanzas por el museo, todos y cada uno de los pasillos revelarán obras de arte hábiles y convincentes.

Salón del Coloso

El primer salón nada más entrar en la Academia. Su gran nombre proviene de la antigua estatua, el Dioscuri di Montecavallo, que estuvo en el museo en el siglo XIX. Era, como probablemente habrás imaginado, imponentemente colosal. Hoy, esta sala ofrece el modelo de yeso de la fascinante y emotiva escultura de mármol del Rapto de las Sabinas de Giambologna.

Las sabinas de Giambologna están rodeadas de una colección increíble de pinturas y esculturas religiosas de Uccello. Filippino Lippi, Perogino, Botticelli y Ghirlandaio de los siglos XV y XVI.

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Visitas guiadas a la Academia

Sala de los Prisioneros

El segundo salón que llamará tu atención es el Salón de los Prisioneros, que toma su dramático nombre de las cuatro esculturas de gran tamaño que representan a esclavos o prisioneros desnudos. Destacan del resto no solo por su irresistible resonancia emocional, sino también por el hecho de estar inacabadas. 

Miguel Ángel dejó intencionadamente sin terminar estas esculturas para describir hábilmente la lucha humana incesante por liberarse de los límites y debilidades de nuestra propia existencia. Lo más importante es que esto que buscaba el artista, se ve claramente reflejado por ser hasta escalofriantemente realistas.

Los cuatro prisioneros estuvieron en el taller de Miguel Ángel hasta su muerte, cuando su sobrino los descubrió y se los regaló al Gran Duque Cosme I Médici. Antes de ser ubicados en la Galería de la Academia, pasaron años decorando la gran Gruta de los Jardines de Boboli del Palacio Pitti.

Tribuna

Seguro que a estas alturas de nuestra visita virtual por la Galería de la Academia te estás preguntando dónde está la estatua de David. La tercera sala te brinda la vista que has estado esperando desde el momento en que pusiste un pie en el museo. En el centro, justo debajo de la favorecedora luz de la claraboya, se encuentra el David de Miguel Ángel en todo su esplendor.

Ver al David en persona no es nada como ver su imagen. Su altura imponente de más de 4 metros, más de 5 si contamos el pedestal de roca tallada esculpido a partir de un bloque sólido de mármol blanco de Carrera, es lo primero que llama la atención de todos los que lo visitan.

La historia del David de Miguel Ángel

Es casi imposible imaginar que el artista solo tenía 26 años cuando el Comité de Obras de la Catedral le encargó esculpir una estatua a gran escala del héroe bíblico David. Se suponía que era una de las grandes estatuas que iba a decorar la cúpula del Duomo de Florencia, pero cuando la presentó todos coincidieron en que la pieza era demasiado maravillosa como para dejarla oculta en lo alto de la catedral. Por eso, estuvo muchos años en la Piazza della Signoria hasta que se trasladó a la Galleria dell’Accademia para su conservación.

David de Miguel Ángel.

Cuando tengas en frente al David, detente a observar sus peculiaridades, como la desproporción de algunas partes de su cuerpo. La cabeza, los brazos y la mano derecha de David son mucho más grandes, ya que estaba destinado a ser exhibido en lo alto y visto desde abajo. Además, podrás notar detalles como las venas y músculos naturalmente tensos, que lo hacen tan realista. 

Gipsoteca Bartolini

Después de ver la estatua de David, no te apresures. La también conocida como Sala de los Modelos, la Gipsoteca Bartolini, tiene una colección de múltiples modelos en yeso del escultor Bartolini y Pampaloni del siglo XIX. Los escultores solían usar estos modelos de yeso para ayudar a dar forma a sus ideas antes de tallarlas en los bloques de mármol.

En general, todas las obras de esta sala representan la evolución del arte florentino desde la época neoclásica hasta la era del romanticismo. Entre las esculturas más populares están las de grandes artistas como Maquiavelo o Brunelleschi. Es una buena forma de conocer y explorar los estándares de belleza, estilo y valores de la sociedad florentina de la época.

Habitaciones góticas florentinas

La última parte de la planta baja de la galería se distribuye en tres salas en las que se muestran pinturas góticas florentinas: pinturas del siglo XII y principios del siglo XIV, pintores giottescos y obras de Orcagna y sus hermanos. La mayoría de las obras son retablos decorados con oro de importantes iglesias y conventos de Florencia con mosaicos brillantes y colores vibrantes.

Museo de Instrumentos Musicales

Para los amantes de la ópera, el teatro o la música clásica, la colección de instrumentos de la Academia es un auténtico paraíso. Las antiguas colecciones del Gran Ducado consisten en cincuenta instrumentos musicales, muchos de ellos dieron forma a la historia de la música. A medida que avanzas en la colección, los instrumentos revelarán la importancia que tuvo la música en la vida cotidiana de Florencia.

Viola tenor de Antonio Stradivari.

La viola tenor de Antonio Stradivari, de 1690, es la pieza más relevante y que no debes perderte. Una pieza de una calidad excepcional, hecha en abeto rojo y madera de arca, decorada con el escudo de los Médici en incrustaciones de nácar, marfil y ébano. Esta viola formaba parte de los instrumentos de cinco cuerdas que utilizaba el “Quinteto Médici”, un grupo de instrumentos únicos construidos para el Gran Príncipe Fernando.

Las herramientas audiovisuales que acompañas a las exposiciones hacen la experiencia aún más inmersiva y especial. Podrás escuchar los sonidos de los instrumentos mientras conocer su historia e importancia.

Florencia entre 1370 y 1420

Aunque las obras del primer piso de la Galleria dell’Accademia no son tan famosas, son impresionantes obras de arte que también merecen ser observadas y conocidas. Suelen estar menos concurridas, por lo que se pueden apreciar mucho mejor. La dirección de la galería reorganizó por completo este piso en 2013 y, en la actualidad, presenta pinturas florentinas creadas entre 1370 y 1420, en el periodo gótico tardío. 

Una de las obras más conmovedoras es la Masacre de los Inocentes de Jacopo di Cione, donde se capta el horror en las expresiones de las madres aterrorizadas que intentan proteger a sus hijos. Otra obra destacada es la Virgen de la Humildad de Gherarducci, más dulce y apacible.

Ubicación de la Galería de la Academia

Detalles

    Horario

    • Martes a Domingo - 08:15 a 19:15 h

    * La última entrada es a las 18:15 h 

    Precio

    • Entrada general: 8 €
    • Entrada reducida: 2 €
    • < 18 años: gratis

Cómo llegar a la Galería de la Academia

    Bus

    • Paradas: Piazza Di San Marco y San Marco Rettorato