Basílica de San Marcos Venecia

San Marcos es el punto más bajo de la ciudad, por eso no es de extrañar que se inunde con facilidad. ¡Pero no te preocupes! Nada impedirá que puedas ver el exterior y el interior la Catedral de Venecia. ¿Cómo te apetece visitarla? Puedes hacerlo sin colas, a tu manera, con expertos, con acceso a su terraza. Lo que menos te importará será el tiempo, ¡aquí se detiene!

La Basílica de San Marcos sabe a gloria, pero puede que quieras mucha más Venecia para tu día. ¿Qué soluciones hay? ¡Disfrutarla con añadidos! Por ejemplo, con paseos guiados por la ciudad, con rutas en góndola o con visitas a otros monumentos destacados de la ciudad como el Palacio Ducal. ¡Dos -o tres- por uno! ¿Qué más se puede pedir?

¿Cómo crees que encontrarás la Plaza de San Marcos? Es toda una incógnita. Lo único seguro es que te quedarás sin habla ante su Basílica. ¡Descúbrela como siempre has deseado!