Excursión a Salzburgo en Tren desde Múnich

Nos reuniremos en la Estación Central de Múnich, al inicio del andén 26. Una vez juntos cogeremos el tren para ir de Múnich a Salzburgo. En el trayecto nuestro guía irá llamando nuestra atención sobre los inmensos paisajes que iremos atravesando en el viaje. Las vistas panorámicas sobre los Alpes Bávaros ya son el primer anticipo de un día rodeados de cosas magníficas.

Al llegar a Salzburgo, comenzaremos nuestra visita guiada. En primer lugar, nos dirigiremos a uno de los escenarios más conocidos de la película “Sonrisas y Lágrimas”, y no es otro que el Palacio de Mirabell, uno de los espacios más conocidos del musical y sin duda uno de los edificios más importantes de Austria.

A la orilla del río Salzach, nos detendremos sobre las vistas del casco histórico de la ciudad. Esta parte de la ciudad austriaca es Patrimonio de la Humanidad, y los motivos saltan a la vista en seguida: amplias avenidas peatonales, iglesias barrocas con pintorescos campanarios, lujosos palacios con espectaculares jardines… Y siempre con el Castillo Hohensalzburg de fondo.

Esta fortaleza, en lo alto de la montaña Festungsberg y es una de las visitas imprescindibles de Salzburgo (puede llegarse en funicular), sobre todo por su imponente presencia, dominando todos los tejados de la ciudad. La Catedral de Salzburgo y la antigua plaza del mercado serán las siguientes paradas de este tour por Salzburgo.  Dese aquí, dedicaremos un tiempo a seguir los pasos de Mozart, una figura que puso en el mapa a Salzburgo y la hizo universal. Un recorrido pensado para ver la historia, la gastronomía y muchas de las curiosidades de esta ciudad que no van a sorprender ¡eso seguro!

El fin de esta visita, no es el fin de nuestro día en la ciudad. Ahora dispondremos de dos horas y media de tiempo libre, para pasear, para hacer comprar y, por supuesto para comer. No dudéis en preguntar al guía sobre los mejores lugares para comer en Salzburgo, sobre estas y otras cuestiones, también tiene un gran conocimiento.

Finalmente, volveremos en tren a Múnich y daremos por concluida la visita. Seguro que después de esto, te apetece viajar a Salzburgo, ¿a que sí? Pues no te entretengas ¡y corre a reservar tus plazas!