Excursión a las Cascadas de Ouzoud

La organización fue Genial, tanto la recogida en nuestra estancia como la llegada , el guía muy amable y estuvo super atento con el grupo, muy recomendable , muchas gracias por todo .

La excursión merece la pena. Por ponerle una pega al restaurante que nos llevaron que no estaba todo lo limpio que debiera, pero es opcional y nosotros nos fuimos a otro. Pero el viaje muy bueno, la experiencia muy recomendable y algo que uno no puede perder.

El sitio es maravilloso y el guía Karim espectacular!!!

El guía ha sido muy majo y las vistas en las cascadas son fantásticas.

La zona que se visita es muy bonita y merece la pena, pero la organización y viaje hasta allí podría mejorarse. Reservamos recogida a las 8 y el día anterior nos pidieron estar en el punto de recogida a las 7h 29m, aún así el conductor apareció a las 8, por lo que esperamos media hora. El viaje fue bien, pero el minibús es incomodo y no pusieron el aire acondicionado aunque hacía mucho calor. Tras el recorrido y la visita a la cascada, te conducen directamente a un restaurante en concreto. Tienes que sentarte allí a comer y no puedes elegir. Nada más ocupar la mesa, el camarero ya te trae la bebida y te pregunta qué quieres de las 5 opciones que hay. Aunque no estuvo mal, no me pareció correcto porque el precio del menú era cerrado y no tuve opción de escoger otro bar. Tampoco me gustó que el guía nos obligara a darle propina antes de reconducirnos a donde estaba el bus esperándonos para la vuelta. Por último, hay que tener en cuenta que se indica que dura 4 horas, y volvimos a las 18h, por lo que fueron casi 10.

Nos recogieron a las 7.30 de la mañana en la plaza central. Nos cambiaron de autobús a las 7.40 y estuvimos parados esperando hasta las 8. Pensábamos que ya salíamos hacia las cascadas cuando el conductor se puso a darnos vueltas y vueltas recogiendo a más gente, fue a echar gasolina, pasó 4 veces por la plaza central (donde nos había recogido a las 7.30) y así estuvimos hasta las 8.45 que recogimos a las ultimas personas al lado de la plaza central. Así que estuvimos 1 hora y 15 parados y dando vueltas para terminar recogiendo a otros en la plaza. Habría sido mucho más fácil recogernos directamente a las 8.45 allí que tenernos dando vueltas más de 1 hora. En el minibus que nos llevaron bien, excepto que mi cinturón en concreto no funcionaba, así que faltaba seguridad. Una vez llegamos al pueblo de las cascadas, nos recogió un guía. Nosotros no habíamos contratado guía, pero nadie nos dijo nada y seguimos con él, pensando que cuando llegáramos a las cascadas cada uno por su lado, pero no. Nos fue llevando por una ruta hasta un sitio donde te intentaban vender aceite de argán. Seguimos la ruta hasta un bar con mirador donde te venden zumos. La ruta sigue hacia el cruce por debajo de la cascada. El guía no nos explicó nada. Nos dijo, o pagáis el barco o cruzais gratis por unos puentes bastante malos donde tenías que ir descalzo y con riesgo de resbalar y caerte al agua. No nos explicó que se podía pagar por cruzar en barco (sin paseo en barco que eso iba extra), así que de eso nos dimos cuenta una vez habíamos cruzado por el puente. Por suerte llevábamos chanclas y toalla, pero si no acabas con los pies sucios y mojados y tienes que ponerte las zapatillas así. Termina la ruta en un bar donde prácticamente te obliga a comer. Te ofrecen un menú bastante simple, poca cantidad y calidad regular a precio elevado. Sí que es verdad que es el restaurante con mejores vistas de las cascadas así que bueno, pagas por la comida con vistas, si es que te ponen justo en la barandilla...si no ni eso. Después se continúa hacia la zona donde están los monos salvajes y luego ya de hace una parada en el baño y se vuelve al bus. En resumen, no recomiendo este tour por la falta de organización y de información durante las horas de guía.

Cogimos guia y barca, el guia era el mismo para todos independientemente de si lo habías pagado o no y el precio en barca allí es 2€. No merece la pena pagar más.

Ver las cascadas de Ouzoud es estar inmerso en un paraíso natural que merece la pena visitar.

Experiencia muy positiva. Se visitan las cataratas, se realiza una excursión por la zona (recomendable botas de treking, por el barro). Nuestro guía, Younes, fue muy simpático, el mejor guía del mundo (como decía él :-)). Hay una pequeña parada donde explican cómo se hace el aceite de argán; los monos que viven por la zona se acercan, acostumbrados a que los visitantes les den cacahuetes... Nosotras contratamos la vuelta en barca, valió la pena!

Muy buena excursión.