Su construcción comenzó en 1401 sobre los restos de una mezquita almohade y se prolongó durante varios siglos, culminando en el siglo XVI. Conocida por su impresionante tamaño, la catedral es un símbolo emblemático de la ciudad y uno de los principales atractivos turísticos de España.
La combinación única de estilos arquitectónicos reflejan las diferentes épocas y tendencias artísticas que influyeron en su construcción:
- Estilo Gótico: la catedral se construyó principalmente en estilo gótico, caracterizado por sus altas bóvedas de crucería, arcos apuntados y grandes ventanales con vidrieras.
- Estilo Renacentista: durante el siglo XVI, se añadieron elementos renacentistas a la catedral, como el impresionante Retablo Mayor.
- Estilo Barroco: en el siglo XVII, se realizaron modificaciones barrocas en la catedral, como la Capilla Mayor y algunas capillas laterales.
- Estilo Mudéjar: algunos elementos de estilo mudéjar, como los azulejos decorativos y las yeserías ornamentales, se conservan en la catedral como reminiscencia de la cultura islámica que dominaba la región antes de la Reconquista.
Destacan elementos como:
- La Giralda: la torre campanario de la catedral es uno de los elementos más icónicos del monumento. Construida originalmente como minarete de la mezquita almohade en el siglo XII, fue convertida en campanario cristiano tras la Reconquista.
- Capilla Real: un espacio sagrado que alberga los restos mortales del famoso navegante Cristóbal Colón. La capilla destaca por su estilo gótico-mudéjar y por sus valiosas obras artísticas, incluyendo pinturas y esculturas religiosas.
- Retablo Mayor: una obra maestra del arte sacro, considerado uno de los más grandes del mundo. Realizado por varios artistas entre los siglos XV y XVI, el retablo está adornado con escenas bíblicas y figuras religiosas que deslumbran a los visitantes con su detalle y belleza.
- Patio de los Naranjos: este encantador patio es un remanente de la antigua mezquita que ocupaba el lugar antes de la construcción de la catedral. Rodeado de naranjos perfumados y fuentes ornamentales, el Patio de los Naranjos invita a los visitantes a disfrutar de un momento tranquilo y contemplativo en medio del bullicio urbano.
La Catedral de Sevilla cuenta con un total de cinco puertas que dan acceso al interior del monumento, siendo la Puerta del Perdón el acceso principal.
¿Cuánto tiempo se tarda en visitar la Catedral de Sevilla?
La duración de una visita a la Catedral de Sevilla puede variar dependiendo del interés y el tiempo que desees dedicar a explorar este impresionante monumento. Esta es una estimación general del tiempo que podría llevar:
Recorrido rápido: si deseas ver los puntos principales de la catedral, como la Giralda, el Retablo Mayor y la Capilla Real, podrías tardar alrededor de 1 a 2 horas. Esta es la duración estimada de las visitas guiadas, en las que el guía te explicará los datos más relevantes.
Recorrido completa: para apreciar las obras de arte, recorrer todas las capillas y disfrutar de la arquitectura en profundidad, es recomendable dedicar al menos 2 a 3 horas. Si eres un amante del arte y la historia y deseas tomarte tu tiempo para absorber toda la belleza del lugar, es posible que necesites entre 3 a 4 horas o más.
Además, hay que tener ten en cuenta las posibles colas para entrar a la catedral, especialmente en temporada alta, por eso es recomendable contratar un tour con antelación para ahorrar tiempo y acceder al interior directamente.
Explorando las Alturas: visitar las cubiertas de la Catedral de Sevilla
Esta experiencia única te permitirá disfrutar de vistas impresionantes de la ciudad y descubrir detalles arquitectónicos que no son visibles desde el suelo.
Por lo general, se accede a través de escaleras o ascensores que te llevarán hasta lo alto de la catedral. Es importante seguir las indicaciones del personal y respetar las normas establecidas durante el recorrido.
Disfruta del privilegio de contemplar Sevilla desde lo alto, observando sus calles empedradas, monumentos emblemáticos y paisajes desde una perspectiva privilegiada. No olvides llevar tu cámara para capturar estos momentos especiales y crear recuerdos inolvidables.
