Ruta Secretos de Tenerife

Salimos en nuestra furgoneta a conocer los puntos más históricos, de algunos de los pueblos más típicos de Tenerife. Si estamos dispuestos a dejarnos sorprender, sin duda ¡esta es nuestra excursión!

El viaje nos va a llevar hasta la Orotava. El casco histórico de esta villa está casi todo intacto, por lo que pasear por aquí es un auténtico viaje por la historia, una historia que se remonta a cuando el reino de Taoro es repartido entre los conquistadores. La producción de vino en la Orotava fue un auténtico revulsivo a su economía y a su actividad. Un ejemplo de la prosperidad y del asentamiento de clases pudientes en la zona, son sus imponentes casonas señoriales del siglo XVII, perfectas para entender la prosperidad de esta zona de la isla.

Uno de los lugares más conocidos del norte de Tenerife, es Icod de los Vinos. En buena parte esa fama le viene dada por drago milenario. Este drago, al que los últimos estudios le atribuyen, aproximadamente 800 años, se encuentra al lado de la Iglesia Parroquial de San Marcos. Hoy, el Drago de Icod, es uno de los símbolos de Canarias. Con sus 17 metros de alto y sus 20 metros de perímetro resulta imponente y, no podemos olvidar que dice la leyenda que los dragones, al morir, se convertían, precisamente, en dragos ¿y si estuviéramos frente a uno de ellos?

Garachico, otra de las paradas de este recorrido, tiene una historia digna de ser contada. Gracias al comercio de vino y azúcar, su puerto fue el más importante de la isla y su vida floreció al tiempo que este comercio adquiría importancia. Pero aquí todo cambió cuando en el año 1706 en volcán de Trebejo entra en erupción sepultando todo a su paso. Aún se pueden ver restos de las construcciones que desaparecieron y, como recuerdo permanente aquí quedaron las famosas piscinas naturales de Garachico, uno de los atractivos turísticos de Tenerife, que se formaron por la lava procedente del volcán.

Este particular recorrido termina en Masca, para muchos el pueblo más bonito de Tenerife. Forma parte del parque rural de Teno, y aquí se conserva, como en muy pocos lugares el auténtico espíritu canario. Se ubica entre acantilados a 750 metros sobre el nivel del mar, por eso quizá los piratas lo eligieron como refugio, y si por algo encandila este rincón, además de por sus calles estrechas sus casas blancas y sus paisajes, es porque desde aquí se obtienen las mejores vistas del macizo de Teno y del valle del Masca.

No te pierdas, si estás pensado en pasar unos días en Tenerife, esta oportunidad para conocer lo mejor de su parte norte. Eso sí, no te despistes ¡y reserva ya tus plazas!