Multiaventura en el Hacienda Park de Punta Cana

Vamos a ser claros contigo y no irnos por las ramas. Si tienes un día entero para disfrutar de las actividades más increíbles que imagines en un espacio de tres millones de metros cuadrados… ¿Cuándo dices que nos vamos a conocer? ¡No te pierdas la aventura más divertida de tu viaje a Punta Cana! Buggies, caballos, safaris, tirolinas… ¡Hay de todo! Corre a reservar que estamos deseando que empiece la diversión.

El día no puede empezar mejor. En cuanto salgas de tu alojamiento, ¡ya tendrás a nuestro vehículo esperándote a la puerta! El viaje no se hace muy largo. Que el nombre no te dé miedo. Hacienda Park no hace inspecciones o paralelas, ¡solo tiene diversión! Al llegar, nos dividiremos en pequeños grupos para comenzar un circuito lleno de momentos emocionantes. ¿Arrancamos? ¡Vamos a ello! Los más peques tienen una zona especial para ellos, si no quieren hacer este circuito.

No hay un orden establecido, solo te diremos que estarás aquí toooodo del día. Puede que tu comienzo sea al volante de unos buggies. Vamos a poner a prueba tus dotes de piloto por todos los terrenos, ¡así que atento! Además, esta ruta servirá para conocer el río Anamuya, donde por cierto podremos darnos un baño. En este sentido, y ahora que nos acordamos, lleva ropa de baño, toalla y ropa para cambiarte. 

De estar a los mandos de un buggie a subirse a los lomos de un caballo. Con ellos nos adentraremos en la naturaleza dominicana, para ver sus preciosos árboles y plantas tropicales. Por cierto, ¿al trote o al galope? Vamos a ver de qué eres capaz. Y del caballo a un camión militar. No, nos vamos de batallas, pero sí a conocer las costumbres y tradiciones locales en un safari por los alrededores del parque. Veremos muchas plantaciones locales de cacao, café y azúcar, además de degustar algunos de los productos locales más sabrosos. ¿Nos guardas algo?

Al regresar al corazón del parque, llega el momento de soltar toda tu adrenalina. Cinco tirolinas, 200 metros de desnivel y 70 kilómetros por hora. ¿Te atreves? Cuando te lances verás una panorámica brutal de los Valles de Anamuya. Una de las tirolinas, ¡tiene más de un kilómetro de largo! Se te van a poner todos los pelos de punta. Pero espera que todavía hay más. De tirarte por una tirolina a lanzarte al vacío desde 20 metros de altura. ¿Conoces el Quick Jump? Saltarás agarrado a una cuerda, aunque si es demasiado fuerte para ti, puedes optar por no hacerlo y bajar por las escaleras.

Mucho más tranquilo será subirte después al único telesilla de la República Dominicana. En él subirás a lo más alto del parque, desde donde ver toda la selva de Anamuya y el Mar del Caribe. Desde arriba, ¿cómo quieres bajar? Tienes de nuevo el telesilla, ¡o más tirolinas! Al llegar abajo, y para acabar el día, nos espera un buffet con comida local que está para chuparse los dedos. ¿Qué te parece el día? ¡Reserva ya y vívelo en primera persona!