Entradas a la Sainte Chapelle

La Sainte Chapelle fue diseñada a mediados del siglo XII, bajo las órdenes de Luis XIV, para acoger las reliquias de la Pasión de Cristo, entre las que destaca la Corona de Espinas. La posesión de estas reliquias designó en su día al monarca, como jefe de la cristiandad occidental. Esta capilla y la Conciergerie, son las únicas partes que se conservan hoy en día del palacio real más antiguo de Francia.

Esta joya de estilo gótico fue construida en un tiempo récord de tan solo 7 años y es además Patrimonio de la Humanidad. Lo entenderás cuando contemples sus maravillosas vidrieras que representan 1113 escenas del Antiguo y del Nuevo Testamento. Gracias a las innovaciones del sistema constructivo gótico, esta capilla prácticamente carece de paredes, en su lugar se encuentran las vidrieras de 15 metros de altura que filtran la luz inundando el interior de un abanico colores.

En realidad, son dos capillas en una. La capilla baja, se construyo en honor a la Virgen y soporta la capilla alta, donde se encuentran las vidrieras mencionadas anteriormente. Algunos consideran este templo como símbolo del apogeo del arte gótico y es que sus altos cielorrasos, su escalera ceremonial o sus épicas cristaleras conforman una obra maestra del gótico radiante. 

Situada en la pequeña isla de la Cité y en medio del río Sena, este impresionante símbolo de arquitectura gótica es un edificio muy importante por motivos religiosos y también políticos. Sin duda, una visita imprescindible para todo aquel que pise París. ¡Descúbrelo por ti mismo!