Free tour Brujas Medieval con degustación de chocolate

Hay ciudades que no necesitan adornos para impresionar, y Brujas es una de ellas. Este free tour será una forma completa y agradable de adentrarse en su pasado, recorriendo a pie sus plazas históricas, calles adoquinadas y rincones con siglos de tradición. Y como en todo buen paseo por Flandes, no faltará un momento para saborear uno de sus emblemas más apreciados: el chocolate.

Comenzaremos en la Grote Markt, rodeada de antiguas casas gremiales y presidida por el campanario de Belfort, que durante siglos marcó el ritmo comercial de la ciudad. Muy cerca encontraremos el Palacio Provincial, reflejo del poder local.

Desde allí llegaremos a la Plaza Burg, un conjunto monumental donde destacan el Ayuntamiento del siglo XIV, el antiguo Palacio de Justicia y la basílica de la Santa Sangre, famosa por custodiar una reliquia que cada año protagoniza una de las procesiones más conocidas de Bélgica.

Entre callejones y puentes llegaremos al Mercado del Pescado y a la plaza de los Curtidores, zonas asociadas a la vida cotidiana y económica de la ciudad. Después, el Muelle del Rosario nos regalará una de las vistas más icónicas de Brujas. Siguiendo el Canal Dijver pasaremos por Gruuthuse y cruzaremos el Puente de San Bonifacio, uno de los rincones más fotografiados.

La ruta nos llevará también hasta la Iglesia de Nuestra Señora, que alberga una escultura original de Miguel Ángel, y el Hospital de San Juan, uno de los más antiguos de Europa.

En Pur Chocolat haremos una pausa para saborear un bombón artesanal, elaborado según técnicas tradicionales. También nos acercaremos a la cervecería De Halve Maan, donde aún hoy se elabora cerveza siguiendo recetas familiares.

Ya casi al final, recorreremos el Beginario, un conjunto silencioso que fue hogar de comunidades religiosas femeninas, y terminaremos en el Minnewater, el Lago del Amor, rodeado de álamos, cisnes y leyendas locales.

Déjate sorprender por los sabores de la ciudad y apúntate a este free tour Brujas Medieval con degustación de chocolate. Te esperan paisajes únicos, relatos inolvidables y el aroma inconfundible del buen cacao.