A lo largo de todo el territorio español, nos encontramos con miles de lugares mágicos en los que relajarnos y alejarnos del estrés de la vida en la ciudad y el día a día. Sitios rodeados de naturaleza que son una auténtica delicia para desconectar mientras disfrutas de un agradable paseo junto a la fauna y flora del país. Hoy os presentamos las mejores cascadas del país. Las más altas, otras cuya altura no es tan grande, las que más agua llevan y aquellas cuyo caudal no es tan grande. ¡Descúbrelas con nosotros!
El agua es uno de los bienes más preciados del planeta, por no decir el que más. A lo largo de toda España, existen multitud de cascadas que son una auténtica maravilla de la naturaleza. Espacios en los que enamorarse del entorno natural que las rodea a la vez que practicamos algún deporte o nos relajamos con la tranquilidad y las imponentes vistas que nos rodean. Cuando llega el fin de semana, las vacaciones o días festivos, a todos nos gusta una pequeña escapada para mover las piernas y pasar un día diferente. Nosotros lo sabemos, y por ello te recomendamos las mejores cascadas en España. ¿Quieres descubrirlas? ¡Vamos a ello!
1. Salto de Nervión
Esta increíble cascada la encontraremos en el límite que marcan las provincias de Burgos y Álava. Lo primero que debemos decir es que os va a dejar boquiabiertos. Estamos ante la cascada más alta de España. El agua desciende a lo largo de 222 metros, formando una imagen increíble que maravilla a todo aquel que la visita. Un momento de paz y relax junto a la naturaleza que conforma uno de los mayores atractivos turísticos de la región. Si no habéis estado aún allí, merece la pena, y mucho, conocerlo.
El Salto de Nervión hará que quieras regresar nada más marcharte. Resulta indescriptible lo que se vive en un lugar y un entorno privilegiados y rodeados de uno de los mayores paisajes naturales del país. Desde el mirador podrás sentir y ver este espectáculo de la naturaleza, así como el cañón del Nervión y el valle de Délika. Un paraje en el que, además, también te encontrarás con diversas sendas y caminos en los que hacer deporte y desconectar. ¡No lo pienses más y vete a conocerlo! ¡Te encantará!
2. Cascada de Los Colores
Fuera del territorio peninsular también tenemos muchas de las mejores cascadas de España. Las Islas Canarias son uno de los mayores atractivos turísticos del país. Pero hoy no queremos hablaros de playas y hoteles, sino de la magia que desprende la Cascada de los Colores. Dentro de la Caldera de Taburiente, en pleno corazón de La Palma, se forma este salto de agua, que se precipita entre rocas teñidas de vivos colores. Un espectáculo increíble que no te puedes perder.
Una de las opciones que os recomendamos para llegar a esta increíble Cascada de los Colores es hacerlo a través de una ruta de senderismo que puedes completar mientras disfrutas de un agradable paseo rodeado de naturaleza o, si lo prefieres, corriendo, ya que es un lugar perfecto para cargar a las piernas con unos kilómetros de carrera. Esta es, quizás, la opción más larga para llegar hasta este mágico lugar, pero os aseguramos que merece la pena, porque en todo momento te acompañará la belleza natural que la rodea.
3. Cascadas de Oneta
Viajamos ahora hasta el paraíso verde. Nos vamos al norte de España, al Principado de Asturias. Un lugar privilegiado donde se funde todo. Desde la inmensidad del Cantábrico hasta las mejores rutas de montaña. La región lo tiene todo, y uno de los mejores planes es ponerse la mochila, las botas, la ropa de deporte y emprender una ruta por uno de sus miles parajes naturales. Una de ellas es la de las Cascadas de Oneta, llamadas así por la aldea en la que se encuentran, en el concejo de Villayón.
Las Cascadas de Oneta son un conjunto natural de tres saltos de agua cuya altura máxima alcanza los 15 metros de altura en La Firbia, la primera de las tres que te encuentras. Las otras dos reciben los nombres de Firbia d’abaxo o la Ulloa y A Maseirúa. Esta última es la que tiene un peor acceso. Un lugar, en conjunto, declarado Monumento Natural en el año 2001 a través del que también puedes practicar deporte.
4. Cascada Cola de Caballo
En pleno Pirineo Aragonés, en el valle de Ordesa, se esconde la Cascada Cola de Caballo, declarada Patrimonio de la Humanidad en el año 1997. Esta caída de agua se encuentra en medio de una fantástica ruta de algo más de 17 kilómetros (entre ir y volver) y que estamos seguros de que os encantará. Este es un insuperable plan para pasar un agradable día en Huesca junto a la naturaleza mientras hacemos deporte. A lo largo de la ruta, irás viendo el bosque y varios prados, en un entorno natural que te cautivará.
La Cascada Cola de Caballo se precipita a lo largo de una serie de escalones, por los que fluye el agua hasta llegar abajo. La altura de esta cascada alcanza los 50 metros, y aunque no es la única cascada de la zona, ya que también destacan las de Gradas del Soaso, la del Estrecho o la de la Cueva, sí que es la más imponente de todas. Además, hay que decirlo, no te quedarás con las ganas de ver el resto, ya que todas ellas se pueden contemplar a lo largo de esta maravillosa ruta.
5. Salto de Orbaneja del Castillo
Orbaneja del Castillo es uno de los pueblos más bonitos y espectaculares de Burgos. Cuando llegamos a este privilegiado lugar, nos vamos a asombrar con sus casas y la vida que de ellas se desprende. Un paraje encantador por el que el agua fluye a través de una de las cascadas más bonitas de España, conocida como el Salto de Orbaneja del Castillo. El caudal del río que pasa a lo largo del pueblo se extiende desde lo alto del municipio hasta su desembocadura en el río Ebro.
El agua fluye a lo largo de todo el pueblo a través de una magnífica cueva. Y después de pasar por delante de las casas que forman esta pintoresca población, desciende a lo largo de esta cascada, ubicada en medio del increíble cañón del Ebro, donde desemboca. Un lugar mágico ideal para conocer y pasear, en una ruta que te enamorará como otras pocas.
6. Cascada de Maro
En plena costa de Málaga, en Nerja, encontramos uno de los saltos de agua naturales más increíbles del país. La Cascada de Maro es una auténtica maravilla. Quizás no sea una de las más conocidas de España, pero estamos seguros de que os enamorará de tal forma que querréis volver una y otra vez. Se encuentra dentro del Paraje Natural de los Acantilados de Maro – Cerro Gordo y tiene unos 15 metros de altura. Además, está rodeada de un entorno increíble, desde el que se pueden capturar las mejores fotografías de la zona.
Aquí el deporte más recomendable para llegar hasta la Cascada de Maro no se hace con las piernas, sino con las manos. Toca ponerse el chaleco salvavidas, estirar los brazos y coger fuerte el remo para ir en Kayak, siempre con mucha precaución, hasta la zona. Hay que decir que, a diferencia de las cascadas que hemos visto hasta ahora, esta desemboca directamente en el mar. Merece la pena ir a visitarla y disfrutar de todas las actividades deportivas al aire libre que se pueden hacer allí. ¡No te la pierdas!
7. Salto de Sallent
Barcelona esconde una de sus mayores joyas en el pintoresco pueblo de Rupit. La riera de este lugar, que recorre este bellísimo lugar, acaba precipitándose en el llamado Salto de Sallent, uno de los más altos de España, con más de 100 metros de caída. Además, esta es también una de las caídas más verticales de todas las que hemos hablado hasta ahora, por lo que es común que sea uno de los sitios favoritos para todos los que os guste el rápel.
Un lugar idóneo para disfrutar del deporte. Y es que al margen del rápel también podrás caminar por un entorno natural privilegiado, uno de los más espectaculares de toda Cataluña. Este sitio se encuentra al norte de Barcelona, y es un reclamo perfecto para huir del estrés y el ruido que impera en las grandes ciudades. Las aguas de se precipitan en el Salto de Sallent, tras recorrer otros parajes, acaban desembocando en el embalse de Susqueda. Todo ello conforma un lugar que no puedes perderte.
8. A Seimeira de Vilagocende
Nos vamos ahora hasta el Concello de A Fonsagrada, en la provincia de Lugo. Allí encontraremos una ruta corta y sencilla de hacer, inferior a los tres kilómetros de distancia entre ida y vuelta. Arrancando desde el camino que hay junto al aparcamiento nos adentraremos en un precioso paraje natural que nos llevará hasta la Cascada A Seimeira de Vilagocende, la más alta de Galicia con una caída de unos 54 metros.
La ruta para llegar a esta cascada es simplemente increíble. El camino te lleva por dentro de un imponente bosque que te permite disfrutar, al final del camino, de la cascada desde diferentes posiciones y ángulos. Aquí podrás tomarte las mejores fotografías y cruzar al otro lado del río a través de un puente. Una ruta que es más corta que las anteriores, pero que, sin duda, merece la pena hacerla. No te arrepentirás de conocer esta joya natural de la provincia de Lugo. ¡Ven a conocer A Seimeira de Vilagocende!
Estas son solo algunas de las cascadas que puedes encontrarte a lo largo de España. Nosotros hemos elegido las ocho que más nos han gustado, porque al margen de la belleza natural que las rodea, son un fantástico reclamo para hacer deporte. Ya sea andando, corriendo o realizando otros deportes aprovechando las caídas del agua. España es un país con una riqueza natural incuestionable, y aquí tenéis alguna de sus maravillas. ¡No lo pienses y disfruta de estos entornos naturales!