El talento no tiene edad, pero sin esfuerzo y dedicación llegar a la meta se vuelve un trabajo demasiado arduo. Es una las primeras carreras de David Salvador. Los motores rugían en la línea de salida y el público estaba emocionado. El piloto cerró los ojos y respiró profundamente, sintiendo el ruido ensordecedor de los motores a su alrededor. En su mente, repasó cada detalle de la pista, visualizando cada curva, recta y punto de frenado. Sabía que cada segundo contaría en una carrera tan intensa como esta, y estaba decidido a dar lo mejor de sí mismo.
El talento no tiene edad, pero sin esfuerzo y dedicación llegar a la meta se vuelve un trabajo demasiado arduo. José Alonso le recomienda los lugares más locales y tradicionales de Bruselas a uno de sus clientes y decide, al momento, que es la última mesa que sirve en ese hotel. Sale por la puerta, se da cuenta de que hace muy buendía y el semáforo se pone en verde.
¡Empieza la carrera! Es 2013 y ambos valientes se lanzan sin mirar atrás. Conscientes de que pueden venir curvas, cogen velocidad y se suben al piano. ¡No hay tiempo que perder! Los comienzos no son fáciles, pero si algo tienen en común estos dos valientes es que nunca se han rendido a pesar de las dificultades.
¡Que van a subir los vecinos! David todavía no sabe caminar, pero su moto de juguete no se la quita nadie. Va de un lado para otro a todo gas. Su familia se queda mirándolo mientras intercambia miradas cómplices. Cuando cumple 5 años, su tío le regala su primera moto. El circuito le llama, y ¡el podium y el champagne para niños también! Está con fiebre, pero igualmente decide participar. Su sueño está cogiendo forma.
José se compra una furgoneta y empieza desde cero. Esto de compartir los lugares reservados para los locales, recomendar los rincones más molones y vivir experiencias inolvidables es, de verdad, lo suyo. Se sienta y diseña los primeros itinerarios. Lo hace con mimo y pensando en cada detalle. Su teléfono suena constantemente y él, feliz e ilusionado, lleva a sus conocidos más cercanos de paseo. Y llegan más llamadas. La furgo se queda pequeña. Las recomendaciones sobre “ese asturiano en Bruselas” se disparan como el agua del Manneken Pis. Es momento de decidir e invertir. Su sueño está cogiendo forma.
Año 2018. Nadie dijo que fuera fácil, pero ahí está David con la cabeza bien alta. Entra en el recinto con sus compis becados. Son un grupo humilde, sí, pero otro David ya pudo con Goliat, así que, ¿por qué, no? Cuando entran al recinto, sus competidores parecen sacados de uno de esos anuncios increíbles de la tele. Solo falta que se refleje un destello en el colmillo derecho de uno de ellos. ¡Ah! Vaya. Destelló. Y esas motos… ¿Cómo pueden brillar tanto? ¿Las habrán usado alguna vez? Uno de ellos se gira, mira a David de arriba abajo, y aparece en él una sonrisa de lado. David apenas la ha notado porque está más preocupado de arreglar el sillín de la suya, que se le ha movido un poco. No está muy seguro de la transmisión, que la cambió hace nada y el motor ruge algo diferente que la de las demás. ¡Todos a los puestos de salida!
Año 2018: Nadie dijo que fuera fácil, pero ahí está José con la cabeza bien alta. ¿Quién eres tú? Ya está acostumbrado a esa pregunta, es un habitual en las conferencias de viajes, en las agencias, entre los proveedores de experiencias… ¿De qué empresa dices que eres? ¡Si en turismo ya está todo el pescado vendido! Las caras de incredulidad de los CEO de las mayores empresas del sector no le frenaban ni un segundo al explicar su proyecto y la manera en la que José concibe el turismo: Sostenible, local, respetuoso y con experiencias individuales y únicas. ¡Nada de ir como ovejitas! Nunca supo si fue por su entusiasmo, por su admirable insistencia o por la pura curiosidad que le generaba a la gente, pero su marketplace empezaba a crecer. ¡Línea de salida!
Quedar tercero aquel año, ¡no fue para nada una derrota! Y desde entonces se repite una idea en cada carrera: Todo es posible, hasta el último minuto. ¿Sus valores? Respeto, humildad y compañerismo. Sin eso, no habría llegado hasta aquí. En 2021, el Rivacold Snipers lo escogió como sustituto para dos carreras de la categoría ligera del Mundial. La bandera a cuadros está cerca, y aunque no la ve la puede sentir. Pero, todavía está en la mitad y llegan las curvas. Se ha preparado mentalmente para hacer frente a los obstáculos y seguir a pesar de las dificultades. En 2022 iba a debutar a tiempo completo en el Campeonato del Mundo de Moto3 con el equipo BOE SKX, pero por razones económicas no pudo ser. Pero una batalla no define la guerra.
“Buendía Tours ha recibido un premio por sus tours en español, una de sus especialidades, ya que se dedica específicamente al mercado de habla hispana”. José no podía creer que esto fuera verdad. Un pitido, dos pitidos, tres… ¡En Asturias le cogen la videollamada! La bandera a cuadros está cerca, y aunque no la ve, la puede sentir. Pero, todavía está en la mitad y llegan las curvas. Se ha preparado mentalmente para hacer frente a los obstáculos y seguir a pesar de las dificultades. Le cuenta a sus seres queridos la noticia y lo celebran a distancia. José recuerda por qué decidió emprender en Bruselas su proyecto mientras la tierrina le empieza a llamar de nuevo. ¿Por qué hay que irse fuera para emprender sueños? ¿Por qué no hacerlo desde el lugar que naciste? Una batalla no define la guerra. Tiene que pensar.
Año 2023. David y José se sientan a tomar un café mientras ponen en común su historia y se ríen al darse cuenta de la cantidad de detalles que tienen en común. Por no hablar de los valores que comparten, cada uno en su ámbito. Respeto, humildad y compañerismo. Pero también talento trabajado, muy trabajado y valentía a la hora de luchar por sus sueños. ¿Colaboramos juntos? Las mejores decisiones se toman con una sonrisa y un café durante un buendía. Este año David Salvador debutará en el Campeonato del Mundo de Moto3™ y José Alonso ha conseguido compartir la oficina de Bruselas con una oficina en Oviedo compuesta de un equipo joven, entusiasta y con ganas de revolucionar el turismo local. Ambos siguen corriendo y compitiendo para alcanzar la meta y ver esa bandera negra a cuadros. Lo que su concentración en la carrera no les deja ver es que, desde hace tiempo, ambos dos, ya son unos verdaderos campeones. ¿Esa es la línea de meta?