Excursión Privada a los Molinos de Zaanse Schans y el Gran Dique

Holanda lleva librando una feroz batalla desde hace varios siglos con el agua. El país tiene buena parte de su territorio por debajo del nivel del mar, por lo que a sus habitantes les ha tocado trabajar duramente para conservar sus bienes más preciados y ganar terreno a las olas. Por ello, hay construcciones y lugares que se encargan de que el agua no engulla parte del territorio nacional. ¿Quieres descubrirlo?

El mejor equipo de guías locales expertos te esperará en Ámsterdam. Conocerás la campiña holandesa. Porque en el campo está una de las soluciones. Visitarás el coqueto pueblo de Zaanse Schans, hogar de los míticos molinos tan característicos de los Países Bajos. En la época medieval, estos fueron el motor económico del país.

Su moderno diseño por aquel entonces, permitió a los habitantes locales poder moler rápidamente el grano para convertirlo en productos que después comerciaban. Entrarás en el interior de uno de estos molinos para conocer su funcionamiento. Además, descubrirás también la importante labor de estas construcciones en lo que respecta al agua. Pero aquí no acaba todo.

Aprovechando la visita a Zaanse Scahns, conocerás de primera mano cómo es la vida rural en los Países Bajos. A través de las preciosas calles del pueblo y sus viviendas de madera que se encuentran a las orillas del mar, entrarás a un taller de zuecos. De este modo, sabrás cómo se fabrica el calzado más tradicional de todo el país.

También conocerás Afsluitdijk. Aunque te parezca impronunciable, debes saber que este duque de cierre es una de las obras más relevantes de la ingeniería mundial. Tiene varias misiones, siendo una de ellas la de conectar el norte de Holanda con Frisia, otra de las provincias de los Países Bajos. De este modo, el Mar del Sur acabó siendo un lago artificial.

En concreto, uno de los lagos más grandes del viejo continente. El Gran Dique, que mide 32 kilómetros, cuenta con una autopista de doble sentido y dos carriles en cada lado. Una estructura que ayuda a frenar las olas del Mar del Norte, de forma que no se produzcan inundaciones en las poblaciones que se encuentran en la costa.

Conoce estas dos obras de la ingeniería holandesa que, pese a estar separadas por varios siglos y avances tecnológicos, suponen un gran respiro para los habitantes del país, que intentan seguir ganando terreno al mar. Eso sí, parece que la batalla todavía continuará. Ven con nosotros a vivir esta experiencia de una forma privada y adaptada a todas tus necesidades. ¡No te lo pierdas!