Louvre Museum entry Ticket

París posee rincones y monumentos mágicos difícil de igualar. Una ciudad apasionante, increíble y llena de cultura que te invita a conocer los aspectos más relevantes del arte local, francés, europeo y mundial. Y un buen sitio para acercarse a las riquezas que contiene la capital de Francia es, precisamente, el Museo Louvre. La Gioconda, la Coronación de Napoleón, la Venus de Milo... ¡Descúbrelas todas y maravíllate con ellas!

El Museo Louvre cuenta con más de dos siglos de vida, aunque el edificio en sí posee bastantes más años de historia. Y es que antes de ser un centro cultural, el Louvre era una de las residencias de los reyes de Francia. En pleno corazón de París, con un espacio de 73.000 metros cuadrados y una colección con las obras de arte más importantes del mundo. Así es este museo, que te va a maravillar incluso antes de entrar.

Y es que el acceso al interior del Louvre se hace a través de la mundialmente conocida Pyramide du Lovre. Una auténtica obra de arte que data del año 1989. No exenta de polémica desde el año de su construcción, esta estrada es uno de los mayores atractivos que posee el museo, que se divide en tres alas: Richelieu, Sully y Denon. El Louvre posee cinco plantas y cerca de 300 salas llenas de arte distribuidas en ocho departamentos.

Podréis contemplar algunas de las obras más imponentes del mundo, como la Gioconda o Mona Lisa, de Leonardo da Vinci, que, como sabes, es una de las obras de arte más misteriosas de la historia. Otro de los grandes atractivos culturales es la Venus de Milo, una estatua que data del año 100 a.C. y que representa a Afrodita. En clave francesa, la Coronación de Napoleón en Notre-Dame es otro de los grandes tesoros que podrás encontrarte en el interior del museo.

Como te decíamos, estas obras de arte y muchas otras se pueden visitar a lo largo de ocho departamentos: Antigüedades egipcias, Antigüedades griegas, etruscas y romanas, Antigüedades orientales, Artes del Islam, Pinturas, Esculturas, Objetos de arte y Artes Gráficas. Un recorrido inmenso en el que no te cansarás de ver tesoros culturales. ¡Y todo ello sin tener que hacer cola!

En tu visita a París debes visitar el museo del Louvre, así que ¡Reserva ya tus entradas!